MARINA BAIXA. "Menos ayudas para defender a los consumidores". Así resume la diputada socialista, Mayte García, "la política emprendida por el Partido Popular, con el beneplácito de Vox, en la Comunidad Valenciana". García ha desvelado el "recorte aplicado por el Consell" a las ayudas destinadas a las asociaciones y federaciones de personas consumidoras de la Comunitat Valenciana, una vez comprobadas las ayudas concedidas para este año. Una decisión que, a su juicio, “debilita la defensa de los derechos de la ciudadanía”.
García ha explicado que la línea de apoyo a las actividades de consumo solo financia ahora el 70% de los proyectos presentados, lo que supone un recorte del 30% respecto al anterior gobierno del Botànic, que cubría íntegramente estas iniciativas. “Este recorte limita seriamente la capacidad de las asociaciones para proteger a los consumidores en un momento especialmente delicado”, ha señalado.
La diputada ha puesto el foco en la línea de digitalización COADIG, dotada con 50.000 euros, de la que únicamente se han concedido 8.275 euros, dejando sin ejecutar el 83% del presupuesto previsto. Algunas entidades, como la Unión de Consumidores de la Comunitat Valenciana, recibirán ayudas que no alcanzan ni los 300 euros.
Además, García ha criticado "la tardanza del Consell a la hora de convocar y resolver estas ayudas, así como el escaso margen concedido a las entidades para justificarlas, apenas 15 días". “Todo apunta a una estrategia que reduce la capacidad del movimiento asociativo que defiende a los consumidores, justo cuando la protección de las personas consumidoras es más necesaria que nunca”, ha advertido.
En este sentido, la diputada ha recordado que "los abusos y vulneraciones de derechos se están multiplicando, especialmente a través de los nuevos canales digitales", y ha anunciado que el PSPV-PSOE se "mantendrá vigilante para evitar que esta infraejecución sirva de excusa para nuevos recortes en los próximos presupuestos".