ALTEA. El Ayuntamiento de Altea se queda sin ofertas por el contrato para la rehabilitación y mejora energética de 12 de sus edificios incluidos en el Plan de Barrios. Un proyecto que cuenta con subvención europea y que para esta primera licitación disponía de un presupuesto de 2.900.222,47 euros, impuestos incluidos.

Al Consistorio le está costando sacar adelante esta actuación. Fue en 2022 cuando la Generalitat Valenciana comunicaba la decisión de incluir a la villa blanca dentro de los municipios beneficiados por el Plan de Barrios, financiado por los fondos europeos Next Generation y que en el caso de la localidad de la Marina Baixa obtendría cinco millones de euros. El objetivo es llegar a 24 edificios con un total de 346 viviendas y más de mil personas beneficiadas de forma directa. Además, contaban con una mejora del espacio público y reurbanización de calles del entorno.

Desde entonces, han entrado en un dilatado proceso en el que han necesitado redactar los proyectos y que las comunidades de propietarios culminaran todos los acuerdos para poder licitar el contrato. Así, el Consistorio sacó a concurso público este verano la rehabilitación de los 12 primeros edificios que ya contaban con toda la documentación necesaria. Pero no han recibido ofertas de empresas interesadas.

Después de haber declarado la licitación desierta, el concejal de Urbanismo, José Orozco, explicó a Plaza que la intención es sacarlo adelante a través de un contrato negociado sin publicidad, donde se valora la oferta de una o más empresas que hayan sido invitadas a participar y así escoger la más ventajosa para el interés general del pueblo.

Hay que tener en cuenta que la subvención tiene fecha de caducidad. En teoría, cuando se aprobó se dio con la condición de que estuviera terminado antes de junio de 2026. Sabiendo que el plazo para la ejecución de la obra es de seis meses, los tiempos están más que ajustados, sobre todo, para los que están aún sin licitar. En este sentido, el edil señaló que la justificación de la obra se pide en diciembre de 2026, por lo que se está planteando la opción de que se pueda alargar el plazo de fin de la obra hasta ese momento.

Plan de Barrios

El proyecto aprobado en su día se calculaba en un coste total de 6.099.374 euros. De ellos, 4.653.124 proceden del Ministerio de Agenda Urbana, otros 272.060 euros de la Generalitat, otros 822.930 del Ayuntamiento de Altea y 351.260 euros de los propietarios.

La actuación completa se refiere a dos ámbitos de características socieconómicas similares. Uno de los principales objetivos es la eficiencia energética, con la finalidad de reducir el consumo entre el 45 y el 60 % en 192 viviendas, además se espera que sea superior al 60% en otras 154. El proyecto contempla la sustitución de ventanas y la mejora de la envolvente donde se precise, además de la sustitución de equipos, retirada de amianto y la instalación de placas solares. También se repararán aquellos inmuebles que presenten patologías estructurales en la fachada o la cubierta, al igual que aquellos que requieran obras de accesibilidad como la instalación de ascensores.

La licitación que ha quedado desierta se dividía en dos lotes. El primero abarca los edificios ubicados en los números 1, 9, 11, 13 y 21 de la avenida Jaume I, y los números 8 y 10 de la calle Zubeldía. Mientras que el segundo, incluye los situados en el número 2 de Metge Adolfo Quiles, el 34 de Jaume I, el 49 de Conde Altea, el 9 de Garganes, y 2-4 de Gabriel Miró.