BENIDORM. Se trata de una de las obras más importantes para la comunidad educativa del municipio de Benidorm, que empieza a tener alguna certeza sobre el momento en el que podrá dejar de impartir clases en barracones. La Conselleria de Educación prevé iniciar las obras del IES Pere Maria Orts i Bosch a finales del mes de abril. Así lo confirman fuentes del departamento autonómico que dirige José Antonio Rovira después de haber formalizado la adjudicación con la empresa ganadora del concurso público, Vialterra Infraestructuras.
Fue el pasado 28 de marzo cuando el director general de Infraestructuras Educativas firmó el contrato junto a la empresa mencionada. Se daba por tanto el paso necesario para dar vía libre a las obras, que podrían iniciarse en las próximas semanas, con la previsión de que sea antes del mes de mayo. El plazo estipulado para la ejecución es de 18 meses, tal y como recoge el documento, contando a partir del acta de comprobación de replanteo, por lo que su finalización no llegaría hasta después del verano de 2026.
Así lo refleja también el presupuesto, que para el 2025 asciende a 8.272.008,67 euros, mientras que para el 2026 llega a los 4.616.547,83 euros, todas las cantidades con IVA incluido. En total, 12.888.556,50 euros, un importe que está financiado por la Unión Europea a través del Programa Comunitat Valenciana Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) 2021-2027.
Los trabajos necesarios para poner a punto el instituto pasan por la demolición del bloque afectado, su construcción y adecuación del centro. Según consta en el programa de desarrollo, en el primer mes de contrato abordarán el derribo del edificio existente y en el cuarto mes se espera que comience la cimentación de la nueva construcción, que se alargará durante tres meses, para después dar paso a la edificación. Unos trabajos que convivirán con el curso escolar, el actual, el siguiente que comienza en septiembre, y parte del que se estrene en 2026.
Como se recordará, el instituto cuenta con aulas prefabricadas en el patio donde se imparten clases ya que las aulas no se llegaron a terminar. La obra comenzó en 2009 y se paralizó dos años después por problemas económicos de la constructora. Desde entonces, se ha intentado retomar la actuación hasta en dos ocasiones. La primera fue en 2018, pero no acabó bien. Una vez iniciados los trabajos se tuvieron que interrumpir al encontrar daños en la estructura que aconsejaban la demolición. Y la segunda vino después, ya incorporando el derribo.
Nuevo edificio
La actuación prevista consiste en la demolición del edificio de los años 70 y levantar el nuevo en su mismo lugar, ubicado en paralelo a las aulas alzadas en 2009-2010, que también serán objeto de mejora y actualización. En total, la superficie construida será de 11.029 metros cuadrados y la correspondiente a los espacios libres a disposición del alumnado, de 9.063 metros cuadrados. En ella se incluyen zonas de juego de educación secundaria, jardines, pistas polideportivas, porches y un huerto.
El nuevo edificio estará compuesto de tres plantas sobre rasante (planta baja más dos alturas), donde se alojarán espacios docentes, servicios generales, servicios higiénicos, espacios administrativos del propio centro y otros que contemplan usos complementarios. El centro estará formado por tres volúmenes: dos grandes cuerpos de edificación en paralelo conectados por pasarelas y el gimnasio preexistente. El centro contará con 20 aulas de Educación Secundaria Obligatoria, ocho aulas de Bachillerato, dos aulas adicionales de Educación Secundaria y ocho Ciclos Formativos, así como una cafetería y una vivienda para el conserje.