VALÈNCIA (EP). Los valencianos de entre 18 y 34 años duermen menos de lo recomendado, es decir, menos de siete horas, y son los segundos que más fármacos hipnóticos y otros remedios sin receta (melatonina, preparados de hierbas, cannabidiol, doxilamina) consumen como ayuda para conciliar el sueño.
De esta forma son, junto a los jóvenes de Castilla y León, los que antes se despiertan los días que tienen una ocupación; los terceros que más trabajan por turnos o con horario irregular (43%), detrás de Baleares (48%) y Navarra (45%) y los cuartos que más roncan (13%).
Estos son algunas de las conclusiones del estudio '¿Cómo duermen los jóvenes? Hábitos y prevalencia de trastornos del sueño en España', que han presentado este jueves Fundación Mapfre, la Sociedad Española de Neurología (SEN) y la Sociedad Española del Sueño (SES), con el objetivo de analizar los hábitos de sueño de este grupo de edad, según han informado en un comunicado.
A nivel nacional, el informe destaca que el 83,5% de los jóvenes españoles presenta algún síntoma nocturno de insomnio, que el 61% se quita horas de sueño de forma voluntaria para realizar actividades de ocio o de interés personal y que, aunque, por lo general, consideran que dormir es tan importante como cuidar la alimentación o practicar ejercicio físico, solo un 24% reconoce dormir bien y lo suficiente. Por el contrario, un 33% de los jóvenes admite dormir menos de lo recomendado.
El estudio es el resultado de una encuesta realizada a 3.405 participantes. Marta Rubio, investigadora principal y neuróloga del Hospital Universitario Parc Taulí de Sabadell, ha subrayado que "la falta de descanso supone un problema grave entre los jóvenes, especialmente por encontrarse en un periodo vulnerable de desarrollo y maduración cerebral, y por el impacto que puede tener en su rendimiento académico".
Asimismo, ha indicado que "la falta de sueño también perjudica a los de mayor edad, sobre todo por las consecuencias que tiene en su rendimiento laboral, estado de ánimo y condición de salud, y cuyas consecuencias son, mayor riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, metabólicas y neurodegenerativas".