ELCHE. Finalmente la sede céntrica de la Universidad Miguel Hernández (UMH) estará en la Plaça de Baix, en la que hasta hace unos meses había sido una oficina del BBVA. Era uno de los espacios que había estado visitando la comitiva universitaria y finalmente, salvo sorpresa, será a priori la sede, ya que los propietarios del local han sido los únicos que han concurrido a la licitación para ofrecer el alquiler a la institución.
Se trata de la comunidad de bienes Francisco Vicente Selva y otros, domiciliada en la calle Mare de Déu del Carme, 2, el mencionado local en los bajos de la conocida como 'Casa dels Paluts'. Han sido los únicos propietarios que han concurrido al pliego de condiciones, que tenía como objetivo busca un local en alquiler para tres años, con un aforo de 150 personas y al menos 400 metros cuadrados. No obstante, queda por destapar un sobre, el de la oferta económica, después de haber acreditado el cumplimiento de requisitos previos y declaración responsable y se ha enviado la segunda plica de criterios evaluables mediante valoración para que lo analice Infraestructuras. Si una vez analizado se cumple con lo requerido, se abrirá este viernes el sobre económico.
Las condiciones de alquiler
A este respecto, la universidad tiene prevista una inversión máxima de alrededor de 252.000 euros para los tres años, aunque las cantidades estimativas según indicó en diciembre el rector Juanjo Ruiz era la búsqueda de un alquiler de unos 50.000 euros anuales. Dado que el objetivo es entrar este mismo 2022, se ha calculado que la parte proporcional con el año ya iniciado sería de unos 56.000 euros este ejercicio, siendo 84.000 el máximo para 2023 y 2024, los dos únicos años completos, y que se podría quedar en 28.000 euros por la parte proporcional de 2025, año en que expiraría el contrato. En el caso de prorrogarse los dos años, se estima que podría ser una inversión de entorno a 350.000 euros. Asimismo, la propia universidad se ofrece a adecuar el espacio si es necesaria alguna actuación, a cambio de que el arrendador ofrezca un periodo de carencia. Después, el precio máximo mensual del que dispondrá la universidad para este asunto es de 7.000 euros.
