ALICANTE. La comisión de fiscalización sobre la contrata de limpieza viaria, recogida de la basura y tratamiento de residuos concluye como comenzó. Es decir, con dos perspectivas distintas: la del bipartito compuesto por PP y Cs, en esta ocasión, secundado por Vox, y la de las tres fuerzas que conforman el eje progresista (PSOE, Unides Podem y Compromís). Así se ha evidenciado en la votación del dictamen de conclusiones de ese grupo de trabajo encargado de analizar el cumplimiento del contrato, adjudicado en el año 2012 a una UTE compuesta por FCC, Ferrovial, Inusa y Grupo Cívica. Finalmente, tras cerca de dos semanas de contactos, la propuesta de conclusiones que ha quedado aprobada ha sido la elaborada por el concejal de Limpieza, Manuel Villar (PP), con la intención de que pudiese convertirse en un documento de consenso. Por su parte, PSOE, Unides Podem y Compromís se han decantado por su propia propuesta alternativa, en la que disentían sobre las causas que, a su juicio, habrían conllevado que el servicio presentase ciertas deficiencias.
Como informó este diario, la propuesta elaborada por Villar pivotaba sobre los cinco ejes que se había pactado entre el conjunto de las fuerzas políticas representadas en el Ayuntamiento. Así, entre otros puntos, al margen de expresar la visión compartida de que el contrato partió con carencias desde su misma licitación, con un recorte del 30% en el precio previsto en el contrato precedente, el documento planteaba dos cuestiones adicionales sobre el futuro de la prestación. La primera: la necesidad de modernizar el centro de tratamiento de residuos de la partida de Fontcalent, de titularidad municipal, con el fin de mejorar la separación y el reciclaje de residuos e introducir una línea diferenciada para procesar la materia orgánica. Y la segunda: la conveniencia de mejorar la labor de vigilancia, ya no solo respecto al trabajo desarrollado por la concesionaria (actual y futura) mediante la ampliación de la plantilla de inspectores municipales, sino también la que debe desempeñar la Policía Local, con el fin de evitar comportamientos incívicos por parte de la ciudadanía (vertido de residuos fuera de los horarios previstos, depósito de enseres en la vía pública, etc.).