VALÈNCIA. La valenciana Grupo Bertolín diversifica su negocio más allá del sector de la construcción de activos y se lanza al rescate de desarrollos urbanísticos bloqueados durante años, muchos de ellos tras el estallido de la burbuja inmobiliaria de 2008. Un área de negocio que llevan años desarrollando, pero que en los últimos meses han estado potenciando con la generación de nuevos entornos urbanos en diferentes puntos de la Comunitat Valenciana como Cheste, València, Paterna, Almenara o Bétera.
Su objetivo es maximizar el valor del suelo para los propietarios y aprovechar la vasta extensión de metros cuadrados urbanizables que tiene la región valenciana, pero que están pendientes de desarrollo. Y más en un momento como el actual en el que grandes fondos y multinacionales tienen en su radar la autonomía valenciana para invertir e instalar sus operativas, pero faltan gestores que acometan esos proyectos de urbanización.
"El nuevo urbanismo tiene que ser bajo demanda. Se trata de retomar suelos que alguien desarrolló hace 15 años, pero que murieron y ahora bajo la demanda de un cliente finalista hay que reactivar, actualizando y siendo capaces de finalizar el proceso urbanístico. Ya no nos podemos dedicar a generar solares que no sirven para nada, sino ejecutar desarrollos completos siempre constatando un interés real de implantación de actividades productivas", defiende Antonio Piles, director General de Desarrollo de Negocio en Grupo Bertolín.
Además, tras el estallido de la crisis inmobiliaria, las entidades financieras dejaron de financiar procesos urbanísticos y los promotores estaban en situación de asfixia económica y no acometían proyectos, por lo que la construcción vivió años de parálisis. Fue en ese momento cuando Grupo Bertolín buscó reinventarse y anticiparse a lo que estaba por venir. Así, en 2008 la compañía arrancó este nuevo cometido, con la creación del Departamento de Desarrollo de Negocio, que encabeza Piles, y que se encarga de la generación de suelos para canalizar proyectos tanto residenciales, terciarios, como industriales/logísticos.
Desde entonces, trabajan con sectores o Planes de Actuación Integrada (PAI) que la crisis frenó, en función de las demandas actuales del mercado. De esta forma, se han consolidado como agente urbanizador tras ejecutar grandes actuaciones de miles de metros cuadrados de superficie como el del Parque Empresarial Circuito de Cheste o la construcción desde cero del nuevo barrio de la ciudad de València, Turianova.