ALICANTE. El mes de junio en Alicante es como un museo al aire libre. Contemplar los monumentos coloridos se convierte en afición tanto para los alicantinos como para los visitantes atraídos hasta esta orilla del Mediterráneo. El calor del sol reinará durante los días de festa en la ciudad, pero la temperatura del astro rey será sustituida por el calor del foc durante la noche del 24 al 25 de junio, protagonizada por la cremà. Sin embargo, las hogueras no siguen el camino del fuego solas, sino que las acompañan a arder las portaladas de las barracas. Y es que, junto a los foguerers, existe otra figura importante que conforma la fiesta de Fogueres de Sant Joan, que son los barraquers.
Las barracas son espacios para la convivencia en la festa y decoran su entrada con una portalada. En total, participan cincuenta barracas, integradas dentro de la Federación de Hogueras y Barracas. El presidente es Antonio Galindo, quien asegura a Alicante Plaza que las barracas están totalmente integradas en la fiesta. «La participación en actos y eventos, tanto propios como en general, es cada vez mayor; participamos prácticamente en todo, como debe ser; si no, qué sentido tendría estar en ella. Por eso somos barraquers», afirma categórico, remarcando su figura y su sentimiento hacia ella.
Al igual que sucede con los monumentos que se erigen, que pueden ser de hasta veinte metros, las barracas también cuentan con una Categoría Especial, que este 2025 está compuesta por cinco barracas, siendo estas Festa i vi, El Cabasset, Los Chuanos, Trons i bacores y Peña Los Gorilas. Esta última es, precisamente, la más antigua que continúa activa en la fiesta, pero antes de ella hubo otra más decana que dejó de existir. Era Els Trenta U, «que se inició en 1931 y se plantó en la esquina de Alfonso el Sabio con San Vicente», recuerda Galindo.
En contraposición, la barraca de más reciente creación es El Foc d’Alacant, a la que el presidente ha deseado «lo mejor», rememorando a su fundador y presidente, Quino García Parodi, «un gran barraquer y miembro de la federación», quien falleció en enero. Sobre la cantidad de miembros en cada barraca, Galindo ha reconocido que es «difícil poner nombre y acertar», porque las barracas se miden en mesas o en socios. «Por ejemplo, hay barracas con treinta mesas, pero que tienen sesenta socios porque han de compartir si no tienen más espacio; mientras que otras se reparten cada mesa un socio y se da de alta a la familia directa», ha explicado.

- Portada de barraca -
- FOTO: RAFA MOLINA
Novedades de las barracas en 2025
Pese a la integración que aseguraba unas líneas más arriba Galindo, las barracas quieren más. Es por ello que este 2025 se presenta con novedades: «Este año se ha conseguido que en el Desfile del Ninot se dé un estandarte premiando a la mejor barraca, para incentivar a la participación del mismo», ha expuesto, añadiendo que es una novedad «que ha venido para quedarse». Relacionado con los galardones, se ha creado el premio para portadas infantiles, con tres estandartes que entregará la Federación de Barracas.
Las barracas también amplían su presencia en la Exposición del Ninot, optando a dos premios este año: uno a través del jurado popular que visita la muestra y vota a través de su entrada y, otro —la novedad—, un premio otorgado mediante un jurado nombrado por la entidad de las barracas. «Hay crecimiento en la participación en esta exposición y era necesario incentivarla», declara Galindo, quien quiere seguir mejorando la parte de las barracas con peticiones como dar de alta a los infantiles y que participen en todos los actos o eventos hechos para ellos. «Esto ayudará a que crezca tanto el censo de barracas como el total de nuestra fiesta; Alicante necesita crecer en festeros», reivindica.
Con respecto al vínculo existente entre la Federación de Barracas y otras instituciones, Galindo ha subrayado la «relación excelente y comprometida» con la Federació de Fogueres. En cuanto al Ayuntamiento de Alicante, «toda ayuda es de agradecer», expresa, siendo consciente de la cantidad de asociaciones festeras con las que cuenta la ciudad y de «lo difícil que es incrementar apoyos económicos» por parte del consistorio, si bien pone el foco en el desarrollo de les Fogueres: «Nuestra fiesta crece, nuestra venta al exterior de la fiesta crece y, por lo tanto, debemos crecer también en este sentido». También asegura que la atención, tanto por parte de la Federació de Fogueres como del Ayuntamiento de Alicante, es proactiva: «Siempre hay un "te escucho" y luego se hace hasta donde se puede», agradece.

- Unos 'barraquers' junto con una colla -
- FOTO: RAFA MOLINA
Tradiciones y logros
Como en cada fiesta, las tradiciones se suceden un año tras otro para darles continuidad. Dentro de la fiesta de Fogueres de Sant Joan, las barracas tienen sus costumbres. La más sonada es, quizás, la de la plantà, «un día muy especial porque se comparte coca amb tonyina y las bacores (brevas)», cuenta Galindo: una tradición que, como apunta, «no se debe perder». Siguiendo con la gastronomía, los almuerzos son el abc de los días grandes y, por otra parte, la música entra en acción a través de las charangas, «que son cada vez más y que alegran las mañanas y los mediodías, consiguiendo que la fiesta se viva por el día y no solo por las noches en los recintos».
Un logro de las barracas ha sido el de la participación en el pregón, consiguiendo abrir el Desfile del Ninot con todos los estandartes juntos. «Es ahí donde se aprecia la grandeza de las barracas», se enorgullece su presidente, quien también comenta la curiosidad de las «barracas hermanadas con otras», lo que hace que durante el año coincidan en actos conjuntos y, además, durante los días grandes se realizan visitas entre ellas, «con la animación que eso supone», concluye Galindo.