ALICANTE. La alicantina Vanadi Coffee ha completado durante el primer semestre de 2025 el giro más profundo de su historia empresarial. La compañía, que cotiza en el BME Growth, ha presentado sus estados financieros intermedios junto al informe de revisión limitada y el grado de cumplimiento de proyecciones. Los documentos confirman la consolidación del nuevo modelo financiero basado en la acumulación de bitcoin como activo principal de tesorería, y reflejan un semestre de transición con una pérdida neta de 1,1 millones de euros, algo inferior, eso sí, a los 1,49 millones registrados un año antes.
Mientras, el importe neto de la facturación se situó en 934.359 euros, frente a los 1,09 millones de junio de 2024, procedentes íntegramente de la explotación de sus cinco locales operativos en la provincia alicantina. La empresa, explican, "continúa con una actividad minorista limitada, mientras canaliza sus recursos" hacia la gestión patrimonial.
117 bitcoins en balance
Hasta el primer semestre del año, Vanadi mantenía 117 bitcoins en su balance, adquiridos a un precio medio de 95.860 euros por unidad, lo que representa una inversión total cercana a 11,2 millones de euros. Estos activos digitales están custodiados por la plataforma ilicitana Bit2Me, que además figura como contraparte en parte de los préstamos de la sociedad. La compañía los contabiliza como inmovilizado intangible, de acuerdo con los criterios del Plan General de Contabilidad, al ser activos no monetarios sin sustancia física, mantenidos como inversión a largo plazo.
El consejo de administración considera este patrimonio digital el eje de su nueva estrategia. En sus proyecciones actualizadas, Vanadi prevé alcanzar 250 bitcoins al cierre de 2025, 500 en 2026 y 1.000 en 2027, bajo un esquema de financiación basado en obligaciones convertibles y equity warrants. La junta general del 22 de septiembre aprobó un marco de inversión y financiación de hasta 1.000 millones de euros destinado a consolidar esta política.
Ingresos en descenso y costes a la baja
Durante el semestre, la sociedad registró ingresos por ventas nacionales de 934.359 euros, una caída del 15% interanual. Los establecimientos con mayor aportación fueron Vanadi Explanada (302.431 euros), Jules Muchavista (310.471 euros) y Vanadi San Juan Pueblo (101.139 euros). En este sentido, el local Maisonnave, inaugurado el año anterior, no generó ingresos en el periodo.
Los aprovisionamientos sumaron 319.052 euros, un descenso respecto a los 415.201 euros de 2024. En gastos de personal, la cifra fue de 806.723 euros, frente a 973.726 euros un año antes, con una plantilla media de 67 trabajadores. Los otros gastos de explotación alcanzaron 571.041 euros, también por debajo del ejercicio previo, e incluyeron servicios profesionales, arrendamientos y suministros.
La empresa mantenía cinco locales en régimen de alquiler, con pagos mínimos comprometidos de 946.026 euros y vencimientos entre 2025 y 2035. El consejo precisó que se avanza en la racionalización de la estructura operativa, con cierres selectivos y traspasos de licencias.
Reequilibrio patrimonial y financiación
El balance semestral muestra un patrimonio neto positivo de 3,74 millones de euros, frente a los números rojos con los que cerró 2024. El capital social ascendía a 622.176 euros, con una prima de emisión de 3,87 millones y reservas negativas de 563.153 euros. La autocartera, valorada en 277.175 euros, representaba el 2,2% del capital social.
La deuda a largo plazo se situó en 1,64 millones de euros, integrada por préstamos con entidades financieras y pasivos asociados a la conversión de obligaciones. En conjunto, la empresa destaca un "nivel prudente de apalancamiento" sustentado por los activos digitales como garantía colateral.
El flujo de caja operativo fue negativo en 781.086 euros, mientras que los pagos por inversiones ascendieron a 5,46 millones, principalmente por la compra de bitcoin. Las actividades de financiación generaron 6,45 millones de entrada, impulsadas por nuevas emisiones de capital y deuda. El efectivo final del semestre fue de 703.783 euros, frente a 24.688 euros al inicio del ejercicio.
"Escenario prudente"
Según el informe de cumplimiento, Vanadi alcanzó el 46% de los ingresos previstos para todo el ejercicio y el 30% del Ebitda proyectado, con una inversión ejecutada equivalente al 20% del objetivo anual. La financiación captada representaba el 24% de lo previsto, y el resultado operativo de los locales, negativo en 118.676 euros, cumplía un 2.500% de lo proyectado, debido a la reestructuración anticipada de la actividad.
El documento señala que las proyecciones se elaboraron bajo un escenario prudente y centrado en la consolidación del balance. Las estimaciones no contemplan beneficios contables a corto plazo, aunque prevén una mejora del flujo de caja por la capitalización del activo digital y la reducción de costes fijos.
Obligaciones pendientes y pagos
A nivel administrativo, la sociedad mantenía deudas con la Seguridad Social por 523.950 euros, correspondientes a cuotas impagadas entre abril de 2024 y marzo de 2025, y retenciones fiscales pendientes por 176.404 euros. Vanadi comunicó que se encuentra negociando un plan de pago y refinanciación con la Tesorería General de la Seguridad Social. El periodo medio de pago a proveedores fue de 98 días, con pagos por 1,06 millones y facturas pendientes por 825.105 euros.
Continuidad asegurada
El consejo de administración asegura en el informe que la empresa "dispone de los recursos financieros y operativos necesarios para continuar desarrollando su actividad durante, al menos, los próximos doce meses". La recapitalización y las operaciones de conversión de deuda ejecutadas durante el semestre permitieron eliminar la causa de disolución detectada a cierre de 2024.
En su nuevo marco estratégico, Vanadi Coffee se define como una sociedad patrimonial orientada a la preservación de valor y a la gestión de tesorería en bitcoin, con un modelo financiero que sustituye progresivamente la actividad minorista. A cierre de junio, la empresa consolidaba el primer paso efectivo hacia esa transformación: menos cafeterías, más capital digital y un balance saneado por ampliaciones y conversión de deuda.