ELCHE. Al grito de "¡Parches no, soluciones sí!", "¡Menos palabras y más compromisos!", o "¡El barrio unido jamás será vencido!", alrededor de 200 vecinos de la calle Clara Campoamor y adyacentes han marchado este martes en parte de la vía para denunciar la situación que llevan viviendo en los últimos meses con problemas de filtraciones, grietas y socavones, y que en realidad se lleva arrastrando desde hace años. Tras la rotura de una acometida el pasado fin de semana, como contó este diario, estos días atrás la zona, sobre todo bloques afectados, se ha llenado de pancartas reivindicativas para exigir acciones al Ayuntamiento.

Tras una visita de Aigües d'Elx este lunes, el martes las comunidades afectadas y la asociación de Porfirio Pascual se reunirán con el alcalde. No obstante, ante la presión vecinal y el eco mediático, este domingo el alcalde y varios ediles se acercaban con técnicos para comprobar la situación e intercambiar opiniones con algunos vecinos. A pesar de ello, el vecindario ha seguido adelante con la concentración y posterior movilización. Desde el Ejecutivo, como ya apuntaba el concejal Claudio Guilabert la semana pasada, el informe geotécnico realizado en febrero indica que no habría oquedades bajo la vía. No obstante, el ambiente está caldeado entre los vecinos, que están intranquilos porque la situación excede a la propia Clara Campoamor. Hay otros socavones y grietas en calles como Juan Maciá Esclapez o Patricio Ruiz Gómez.

Grietas o hundimientos más allá de Clara Campoamor

En este sentido, uno de los vecinos y de las comunidades de propietarios afectadas, Alejandro Cerezola, denuncia que llevan desde diciembre del año pasado sufriendo problemas con la rotura de una acometida de agua, "principalmente por falta de firme". Como se ha venido contando estos días, hay tramos de las aceras de Clara Campoamor que están "huecas", sin relleno inmediato bajo, lo que estaría, según explicaba a los vecinos antes de la manifestación, los problemas en las tuberías. 

Cerezola explica que han sido cuatro meses "de esperar una obra que nunca llegaba", en referencia a la reparación de la rotura de la pasada semana, y con la visita del alcalde este domingo han mostrado las fotos de los problemas que había no solo en ese punto, sino en otros se ha arreglado la acera. "Sigue habiendo huecos en zona de aceras". Apunta a Clara Campoamor 35 y 37 en febrero y el número 14 el anterior fin de semana, pero recuerda que los problemas estos meses y años están también en Juan Maciá Esclapez, el Club de Petanca —aún vallado desde 2022—, Patricio Ruiz Gómez... "Todo el firme se está viniendo abajo. Han realizado únicamente cuatro catas, seis segun el técnico, pero son insuficientes para un espacio tan grande", añade. 

En Juan Maciá Esclapez algunos bloques presentan grietas, así como otros inmuebles de Clara Campoamor que dan al río, señalan algunos vecinos. "Al final son todo pequeñas cositas que están haciendo que el problema sea mayor y hay intranquilidad". La diferencia respecto a los problemas en diciembre es que ahora se han reunido las comunidades de propietarios afectadas para poner los problemas en común, lo que les ha permitido ver que es de mayor magnitud, aunque aún no se puede decir que esté todo relacionado, hasta esperar los informes. 

Así, aunque el mensaje que les transmitía Pablo Ruz es de "tranquilidad", la preocupación persiste. Aunque no han tenido daños reseñables por agua, han tenido dos roturas en menos de seis meses. "Llevamos denunciando esta situación desde 2022 y años anteriores con el Club de Petanca, y creemos que puede ser el mismo problema", indica este vecino ejerciendo de portavoz, y recordando los problemas del colegio Ausiàs March, clalusurado y con ocupas. "En Porfirio Pascual también tienen el mismo problema... Es un un problema de gran magnitud".

Según lo que les traslada el regidor, seguramente se tendrá que levantar el firme para reforzar el relleno, aunque hasta que no vean obras y soluciones claras "no estamos tranquilos". Hay alrededor de un centenar de familias afectadas directamente por las roturas del agua o grietas en edificios. 

Para finalizar, Cerezola pone de relieve, tras la visita del alcalde y ténicos, que "es lo que estábamos esperando y que hemos ido pidiendo reiteradas ocasiones. Buscando a Claudio Gilabert, al equipo de gobierno, a los técnicos... Y siempre nos hemos encontrado, quitando un par de ocasiones, la puerta cerrada, correos sin contestar, llamadas sin contestar". Este vecino insiste. "No estamos aquí de primeras, están siendo semanas de agonía por falta de respuesta y transparencia, pero al final la presión periodística, la presión vecinal, la presión de la oposición ha hecho que nos hagan caso". 

Mientras tanto, y a la espera de ver que inician obras tras ver qué solución posible hay, están recogiendo firmas para entregar en alcaldía y hacer más presión. Esperan llegar a unas 2.000. De forma paralela y a colación del contexto, ciudadanía del barrio que no estaba asociado empieza ahora a informarse con la asociación de Porfirio Pascual para asociarse y ver que con unidad vecinal pueden defender mejor sus derechos.

El Ayuntamiento utilizará el fondo de contingencia

Por último, el regidor ha asegurado que el Ayuntamiento va a intervenir "mediante una inversión eficaz y permanente en el entorno", y se hará por la vía de urgencia, a través del fondo de contingencia del Ayuntamiento, con el que se rellenarán los socavones y se reparará la calle, después de que los técnicos municipales lleven a cabo un informe de valoración.

Por último, el alcalde ha lanzado de nuevo un mensaje de tranquilidad a los vecinos y les ha trasladado que "las estructuras de los edificios de la zona se encuentran en buen estado, con fuertes cimientos y fuertes estructuras" tal y como informan los arquitectos tras comprobarlo de primera mano.