ELCHE. Cuatro legislaturas después, oficialmente empieza la reforma y rehabilitación del Mercado Central de Elche. Tras un largo periodo desde la adjudicación para levantar un nuevo inmueble con el Ejecutivo de Mercedes Alonso (PP), si bien ya hubo proyectos anteriores con Alejandro Soler (PSOE), y años y años de excavaciones, vía judicial, ruptura de contratos y una nueva orientación así como licitación, este 22 de abril es el pistoletazo de salida de las obras para ofrecer una nueva vida al inmueble. Tras el acta de replanteo del pasado 10 de abril, antes de Semana Santa, una vez finalizadas las celebraciones, el edificio ya se ha vallado y a corto plazo se empezará por el retranqueo de la fachada Oeste y finalización de las catas arqueológicas. El plazo de ejecución estimado es de 15 meses.

Carteles de los establecimientos a Puçol

Además de destacar la importancia de un momento anhelado, el alcalde Pablo Ruz también ha apuntado a que se retirarán algunos de los carteles de los viejos puestos placeros de la planta superior para llevarlos al Museo de Puçol "y que le den se sentido como lugar para recordar y salvaguardar nuestra memoria". Con el vallado perimetral, en esta ocasión mucho más ligero que el anterior proceso de excavaciones, que casi llegaban a las fachadas de la Plaça de la Fruita, "primero se realizarán algunos trabajos internos y en los próximos días concluiremos con el retranqueo de la fachada Oeste".

Retranqueo de la fachada a corto plazo

Se desmontará la misma hasta la primera crujía, tal y como estaba establecido en el proyecto, para poder ejecutar y culminar la excavación de los Baños Árabes. Actualmente queda la leñera en una de las esquinas, hasta la altura de esa primera crujía del viejo inmueble, y cuyo objetivo es también, como se planteó en el redactado del pliego, poder contemplar y dar más espacio a los restos arqueológicos árabes del siglo XI. Además de alinear el inmueble con Major de la Vila, altura a la que más o menos empezaría el edificio, recreando su tipología racionalista. Y también se finalizará lo que quedaba por excavar del interior del inmueble.

Asimismo, sobre los Baños, la conselleria de Cultura envió una misiva hace unos días, a la que el regidor resta importancia: "La burocracia por la burocracia", restando hierro a la cuestión, al afirmar que era una cuestión "de forma" sobre la forma en que se había planteado la rehabilitación, y que no supondrá retrasar la obra ni alterarla.

Ahora los técnicos se encuentran desmontando la iluminación y jardinería del entorno de cara a la repavimentación, y en principio no hay problema con el cortejo del Misteri en agosto, según ha añadido Ruz, por la poca ocupación de las vallas, ya que parte del tramo del entorno del inmueble, como parte del recorrido, también "está protegido por Unesco", recalca el alcalde. En cuanto a la zona de la fachada Este en la plaza de las flores se destinará a acopio de la obra. Sobre las fases, lo último será la repavimentación del entorno y la cubierta de los Baños. En cuanto a la duración de las excavaciones, está prevista su duración en seis meses.

Negocios del entorno, de nuevo afectados

En cuanto a la hostelería, con quien ya se ha hablado, las terrazas ubicadas en la Plaza de las Flores sí se podrán mantener a excepción de uno de los restaurantes, en este caso La Saga, de muy reciente apertura, y que podrá trasladar su terraza a la calle Victoria, eso sí, sin el velador. Los otros tres negocios contiguos en la Plaça de la Fruita, la hamburguesería Tremenda, el pub Binalub y la cafetería Shuka Coffee no podrán disponer de terraza hasta que finalicen las obras. Aunque como estaba contemplado en la reforma de la ordenanza del espacio público, se les compensaría con exención de tasas.

Sobre el nuevo mercado, estará formado por 24 puestos de venta tradicional, con una superficie de 15 metros cuadrados, además de zona gastronómica y restauración en los extremos del edificio. Está previsto que los puestos ubicados en los pasillos exteriores tengan salida a las calles contiguas y que muchos de estos puestos puedan trabajar su propio género y ponerlo a disposición de los clientes para que lo consuman en el propio mercado. Al mismo tiempo se va a reponer la cubierta manteniendo la volumetría existente, la conservación de alturas y el lucernario.