ELCHE. La Universidad Miguel Hernández (UMH) lleva desde 2020 realizando mediciones de contaminación sonora en el término municipal, principalmente en el casco urbano y en seis de las pedanías más pobladas, lo que aglutina a 212.484 personas. En total, más de 825 que han dado lugar a un mapeo de la contaminación que ahora saldrá a exposición pública. Fruto de ella tiene que salir un plan de actuación del Ayuntamiento para tomar medidas. Un proyecto que se está realizando de acuerdo a normativas europeas y que está acompañando el Ministerio.
Ahora se somete a información pública el proyecto del mapa, tras la actualización de los datos de la cuarta fase del mismo, que consistió en 282 mediciones en 2023. Elche entró directamente en la segunda fase, ya que la primera es para ciudades superiores a 250.000 habitantes. Aunque la concejal de Comercio y Aperturas, Caridad Martínez, no ha apuntoda a las zonas concretas, otros estudios anteriores de la UMH ya han perfilado diferentes áreas que son conocidas como puntos negros, algunas en Vicente Blasco Ibáñez o Avenida de Novelda, por ejemplo.
Impacto del aeropuerto en L'Altet
A este respecto el estudio se centra sobre todo en el tráfico rodado. Aunque se ha tenido también en cuenta el tráfico ferroviario y el tráfico aéreo, esto es competencia ministerial. Con todo, Martínez destaca también que por ejemplo "no hay fuentes de ruido industrial significativas en los polígonos, es decir, dentro del término municipal", explica. También se identifica un problema claro en L'Altet por la cercanía con el aeropuerto, aunque es competencia del Estado, que a través de Aena lleva años con trabajos de insonorización en viviendas más cercanas.
Reducción del ruido con plataformas únicas y pavimento
No obstante, en las conclusiones, los resultados de exposición ciudadana "muestran una reducción significativa del número de ciudadanos expuestos al ruido de tráfico viario en nuestro municipio, con lo cual entendemos que desde luego son unas conclusiones bastante favorables", subraya la concejal. Ello se debe, en parte, a que se han tomado medidas del Ministerio por ejemplo en el aeropuerto y el tren, y en lo que toca a la parte municipal, se pone de relieve que las peatonalizaciones y plataformas únicas han contribuido a esa reducción de contaminación acústica por los vehículos. Pero no solo ello, sino también el tipo de pavimento utilizado en estas.
Las mediciones
Se ha comprobado la reducción porque la universidad ha instalado dispositivos que han estado midiendo el ruido promedio durante las 24 horas del día, lo que ha permitido ir comparando y ver esa reducción. Las mediciones se han hecho en las rondas de avenidas perimetrales que tienen una intensidad media de tráfico con una velocidad que alcanza normalmente los 80 km/h, las avenidas y vías principales interiores que son de 50 km/h y luego el resto de vías que tienen 30 km/h. De ahí se han sacado los valores que arroja la IMD (Intensidad Media Diaria).
Ahora, una vez se supere la consulta pública, con la integración o no de posibles alegaciones, el diagnóstico se envía a la Generalitat Valenciana, y esta al Ministerio, desde donde se enviarán los datos de ciudades de todo el país a Europa. En base a la aprobación del documento, el Ayuntamiento encargará a una empresa la redacción de una propuesta para ir reduciendo estos parámetros, aunque la edil destaca que ya se está actuando con actuaciones urbanas. Por otra parte, recientemente y a colación de la Zona de Bajas Emisiones, ya se han instalado una docena de sensores en el casco urbano, Torrellano y El Altet, tal y como estaba planteado con el despliegue de la ZBE ilicitana.