VALENCIA. Dijo Braulio Vázquez esta semana, que el Valencia tiene que intentar rebajar costes y reducir fichas de la primera plantilla.

Ese es el gran objetivo del club de cara a la próxima temporada. Pero dentro de esa intención, se esconde una obsesión de la dirección deportiva del club. Conseguir darle más talento y sumarle calidad al equipo.

Para ello, el club trabaja a destajó desde hace meses tratando de sacar el mayor provecho económico a jugadores que no han terminado de cuajar, como Topal y Tino Costa. Además, hay que tener en cuenta que desde el Valencia, asumen que Jordi Alba no seguirá la próxima temporada de blanquinegro.

Esas ventas, unidas a las salidas de los jugadores que acaban contrato, provocan que el Valencia tenga bastantes menos jugadores a estas alturas de temporada, que en los últimos años.

Eso, sin embargo no preocupa en el club. A día de hoy, desde la entidad valencianista entienden que el dinero que se pueda obtener por traspasar a Tino Costa y Topal, sería más provechoso emplearlo para comprar a un solo futbolista, contrastado, que por el contrario fichar a dos jugadores que no le den un salto de calidad al equipo.

El futbolista que quiere el Valencia, y además con el que tiene un compromiso verbal para intentar su fichaje, es Bruno Soriano. Y ese podría ser el ejemplo. El dinero recaudado por el turco y el argentino destinarlo a comprar un jugador internacional por España y que no viniera a crecer en el Valencia.

El club está por la labor de intentar hacer dos refuerzos importantes y no cuatro o cinco, como los pasados veranos.

La dirección deportiva quiere medir bien todos los pasos a dar, pero si no hay cambios en los próximos meses, Braulio quiere fichar un mediocentro defensivo y un delantero que vengan al Valencia a darle un plus de talento y calidad.