Cultura

Crece la participación en la novena edición del Skyline Benidorm Film Festival: más cortos, guiones y shortpitch

El certamen, que ha sido presentado en Madrid, estrena este año Prisma, un encuentro internacional de coproducción para el ‘networking’ y el desarrollo de proyectos

BENIDORM. El Skyline Benidorm Film Festival sigue creciendo de manera significativa a medida que van pasando las ediciones. Desde el próximo 29 de marzo hasta el 5 de abril el certamen celebrará una nueva edición, la novena, que ha sido presentada esta mañana en Madrid. Los datos confirman que el festival crece de forma exponencial un año más.

Así, se han inscrito al certamen más de 800 cortometrajes, lo que representa un 27% más que el año pasado. También se han presentado 497 guiones a concurso –un 51,5% más que en 2024- y hay 53 proyectos en el concurso de Shortpitch, que es un 47,2% más que en la última edición.

 

De esos más de 800 cortos presentados, la organización ha seleccionado 26 en tres modalidades; ficción, animación y documental: ‘Ángulo Muerto’, de Cristian Beteta; ‘Capitanes’, de Kevin Castellano y Edu Hirschfeld; ‘Carmela’, de Vicente Mallols; ‘Co-Haunting’, de Paula Sánchez, Adrián Carande y Pepe Rico; ‘Cólera’ de José Luis Lázaro; ‘Cuando llegue la inundación’, de Antonio Lomas Domingo; ‘Cura Sana’, de Lucía G. Romero; ‘De Sucre’, de Clàudia Cedó; ‘El cuento de una noche de verano’, de María Herrera; ‘El Príncep’, de Alex Sardá; ‘El Showman’, de Cristian Martínez; ‘Els buits’, de Isa Luengo, Sofía Esteve y Marina Freixa Roca; ‘Felina’, de María Lorenzo; ‘La niña tatuada’, de Elisa Lanzas; ‘La noche dentro’, de Antonio Cuesta; ‘Las Chicas’, de Laura Obradors; ‘Los cayucos de Kayar’, de Álvaro Hernández Blanco, ‘Mapa de la geografía emocional’, de Julu Martínez y Candela Megido; ‘Mi Juego’, de David Navarro Bravo; ‘El palacio de la violación’, de Kote Camacho; ‘Semillas’, de Kivu de Néstor López y Carlos Valle; ‘Tesoro’ de Carmen Álvarez Muñoz; ‘Tito’, de Javier Celay, ‘Una cabeza en la pared’, de Manuel Manrique; ‘Utländsk’, de Alba Lozano y ‘Violetas’, de Borja Escribano.

 

Skyline Benidorm Film Festival se mantiene, además, como uno de los pocos festivales en España que otorgan un pago por selección de 200 euros a cada obra seleccionada en sección oficial nacional y desde 2022 cuenta con la distinción de ser calificador oficial para los Premios Goya.

 

El certamen benidormense también da visibilidad a producciones extranjeras y a jóvenes talentos. Así, en la Sección Internacional compiten seis cortos de países como China, Alemania, Italia, Sudáfrica y Reino Unido. La Sección Iberoamericana reúne seis obras de Perú, México, Portugal, Cuba y Chile. Por último, la Sección Jóvenes Realizadores impulsa a las nuevas voces con ocho cortometrajes seleccionados.

 

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Una de las novedades de este año es la creación de Prisma, una iniciativa para conectar y fortalecer el tejido profesional del sector del corto al servir como enlace entre los agentes del audiovisual y potenciar el ‘networking’ y el desarrollo de nuevos proyectos. Nace con la intención de internacionalizar las Jornadas de Industria de Skyline que se celebran desde hace seis años, así como “servir de nexo entre productoras y proyectos de cortometraje que se encuentren en cualquier fase de desarrollo de la producción”, según ha señalado Beatriz Hernández, directora del Skyline.

 

Hernández ha resaltado “la calidad de los cortometrajes seleccionados” y el hecho de que el festival “sigue consolidándose como un referente para cineastas y profesionales del sector”. Ha agregado que este año Prisma “es una oportunidad única para fomentar sinergias entre productoras”.

 

Por su parte, Jaime Jesús Pérez, concejal de Cultura, ha afirmado en la presentación que el Skyline “se ha convertido en un referente en el espacio audiovisual español y ocupa un lugar destacado en la programación cultural de nuestra ciudad” y ha resaltado que año a año crece “en alcance, repercusión, atención e interés por parte del público, los creadores y la propia industria”. En ese sentido, Pérez ha considerado que las cifras de esta edición son “la constatación y el refrendo a un trabajo bien hecho que alcanza a toda la escala de valor del certamen”.

 

El edil ha insistido en que Benidorm “procura estar siempre a la altura y ofrecer su mejor versión”, lo que ha conllevado que la industria identifique y valore a la ciudad “como un destino absolutamente film-friendly”.

 

Jaime Jesús Pérez también se ha referido a la “mejora continua” del certamen, que este año se centra en la internacionalización del mismo con el lanzamiento de Prisma, “un espacio que servirá de punto de encuentro entre productoras y proyectos de cortos en cualquier fase de producción de diferentes nacionalidades, favoreciendo la interculturalidad, las sinergias y la colaboración”. Por último, ha enfatizado tres aspectos del festival que son “fundamentales” para Benidorm como son “ser una propuesta cultural de calidad, una iniciativa impulsada desde lo local por una profesional de Benidorm y estar comprometido con la inclusión”.

 

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