ALICANTE. La escritora alicantina Arantxa Maldonado plasma en sus libros sus momentos de transformación personal que le han llevado a comprender la importancia de soltar lo que ya no suma o a identificar el poder de la intuición cuando se aprende a escucharla. En dos primeras publicaciones, Eje Rubik y Mandalas, proporciona ejercicios que guían al lector en su proceso de autoconocimiento. Ahora, en Reflejo, realiza una labor introspectiva y simbólica que invita a la reflexión a través de relatos y metáforas. Tres libros que ha presentado esta semana en la caseta de Ediciones Dulce Lectura en la Feria del Libro de Alicante.
— Haces un amplio uso de figuras literarias como la personificación ¿Por qué optas por este formato?
—He optado por el uso de figuras literarias, como la personificación, porque permiten que el lector se conecte de una manera más profunda y emocional con la historia. Reflejo no es solo un libro de cuentos, es un espacio de introspección donde cada relato busca despertar algo en quien lo lee. A través de la personificación, los elementos cotidianos cobran vida, convirtiéndose en espejos de nuestras emociones, pensamientos y dilemas internos.
— Conformas un conjunto de relatos en los que desarrollas proverbios con diversas enseñanzas ¿Qué aprendizajes buscas provocar con ellos en tus lectores?
— A través de los relatos de Reflejo, mi intención es que cada lector encuentre una enseñanza que resuene con su propio camino de vida. Los proverbios y reflexiones que desarrollo en cada historia están diseñados para invitar a la introspección, despertar la conciencia y generar nuevas perspectivas sobre los desafíos cotidianos.
Busco provocar aprendizajes que van desde la aceptación y el autoconocimiento hasta la resiliencia y la toma de decisiones conscientes. Cada cuento es una metáfora que, como un espejo, permite a los lectores verse reflejados y cuestionarse: ¿qué me está mostrando esta historia sobre mí mismo? La idea es que puedan aplicar estas enseñanzas en su día a día, encontrando respuestas en su interior y fortaleciendo su capacidad de vivir con mayor claridad, propósito y autenticidad.
— Aunque se trata de ficción, sí aparece tu nombre ¿Se trata de aprendizajes propios?
— Sí, en Reflejo hay mucho de mis propios aprendizajes. Aunque el libro es ficción, cada historia surge de experiencias, observaciones y reflexiones que han marcado mi camino. Creo que el conocimiento y la sabiduría no solo se adquieren en los libros o en la teoría, sino también en la vida misma, en los momentos de desafío, en las pausas y en las preguntas que nos hacemos.
Mi nombre aparece porque no es solo una obra de cuentos, sino un compendio de ideas y enseñanzas que he interiorizado y transformado en relatos. No intento imponer verdades, sino compartir perspectivas que han sido valiosas para mí, con la esperanza de que resuenen en quienes lo leen y les inviten a descubrir sus propias respuestas.
— ¿Cómo se han ido forjando esas enseñanzas personales? ¿Qué episodios de tu vida están plasmados en esos relatos?
— Cada relato en Reflejo lleva impreso un fragmento de mi camino, no como una autobiografía literal, sino como una síntesis simbólica de aprendizajes que han dejado huella en mí.
Algunos relatos reflejan momentos de transformación, como la importancia de soltar lo que ya no suma, la resiliencia ante la adversidad o el poder de la intuición cuando aprendemos a escucharla. Otros nacen de episodios de introspección profunda, viajes, encuentros significativos o incluso pérdidas que me han llevado a replantear mi visión de la vida. Cada historia, de alguna manera, es un reflejo de lo que en algún momento viví, sentí o comprendí, con la intención de que el lector también encuentre en ellas su propio aprendizaje.
— Además de proponer una actitud de superación en tus lectores, ¿tienes un objetivo personal con este libro?
— Sí, además de inspirar a los lectores a la superación y la reflexión, Reflejo tiene un objetivo personal muy profundo para mí. Es un libro que representa mi propio camino de crecimiento y autodescubrimiento, una forma de plasmar todo lo que he aprendido y compartido a lo largo de los años en el ámbito del mindfulness, el liderazgo consciente y el desarrollo personal.
Escribirlo ha sido un proceso de introspección y, al mismo tiempo, una manera de dejar una huella, de aportar algo valioso a quienes buscan respuestas o un nuevo enfoque en su vida. También es un puente para conectar con más personas, abrir conversaciones y acompañar a otros en su propio viaje de transformación. Para mí, Reflejo no es solo un libro de cuentos, es una invitación a mirar hacia adentro y descubrir todo lo que somos capaces de ser.
— Es tu tercera publicación, ya que antes has escrito dos workbooks ¿En qué consisten? ¿Son complementarias estas tres publicaciones?
— Sí, Reflejo es mi tercera publicación, pero a diferencia de mis dos workbooks, no forma parte del programa Neptuno. Los workbooks son herramientas prácticas diseñadas específicamente para este programa con ejercicios estructurados que guían a los participantes en su proceso de autoconocimiento, liderazgo consciente y transformación personal.
Reflejo, en cambio, es una obra introspectiva y simbólica. No sigue una metodología estructurada, sino que invita a la reflexión a través de relatos y metáforas. Este libro no complementa los workbooks, sino que abre un nuevo camino, sirviendo como puente hacia mi siguiente publicación. Es una transición hacia un enfoque más profundo, donde la narrativa se convierte en una herramienta de exploración personal, preparando al lector para lo que vendrá en mi próximo libro.