ALICANTE. Alcoy se ha convertido durante todo este jueves en un río incesante de fans de Camilo Sesto llegados de diversas partes del mundo, que han querido darle el más sentido y último adiós al artista universal. Multitudinaria despedida la que ha tenido el cantante alcoyano en su ciudad natal. El salón de plenos del Ayuntamiento municipal ha tomado el relevo de capilla ardiente –que en el momento del fallecimiento fue la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), en Madrid- donde, desde las once de la mañana hasta las ocho de la tarde, han permanecido sus cenizas. 

Los incontables admiradores y admiradoras de Camilo Sesto han querido hacer extensivo el cariño que ya le manifestaron en vida en estas horas póstumas y se han ido acercando, de manera ordenada, hasta el lugar que le vio nacer. Ha sido desde todos los puntos de la geografía española, sin olvidar a aquellos que han llegado desde Hispanoamérica, desde Perú hasta Uruguay, pasando por México. También de Portugal. De manera bien temprana, como reconocía la primera de las fans que se agolpaba en la puerta del Consistorio. 

“Llevo aquí desde las seis de la mañana”. Un poco más tarde, sobre las nueve y media, el hijo del cantante, Camilo Blanes Ornelas, ha llegado al Ayuntamiento. Acompañado por su abogado, ha sido él mismo quien ha portado los restos mortales de su padre, ‘custodiados’ en una caja blanca hecha expresamente por la funeraria; ha entrado por uno de los laterales al edificio municipal, para conservar la discreción de un acto de este tipo. Así lo ha asegurado a este diario el concejal de Cultura de Alcoy, Raül Llopis, quien ha permanecido en constantes negociaciones con el heredero universal de Camilo y de quien, tras conocerle, ha dicho que es “muy amable y también un chico introvertido”.

Un hecho que ha sido contrastado horas más tarde. Camilo Blanes Ornelas, más conocido popularmente como ‘Camilín’, ha querido dedicar unas palabras a su padre ante los medios cuando eran las doce del mediodía: se ha mostrado “impresionado” por el “cariño” que Alcoy, y también el resto de seguidores “de España y del mundo entero”, le ha proporcionado a su padre. “Él es parte de mí, estoy contento de que él va a recibir todo lo que ha merecido, por la vida que ha dado”, ha dicho, notablemente emocionado. “Sabía que este acto iba a ser algo arropado y muy bonito”, ha reconocido.