VALÈNCIA. Aunque casi toda la atención sobre lo ocurrido en la Dana está puesta en el barranco del Poyo, que provocó la mayor parte de las 230 muertes el pasado 29 de octubre, el desbordamiento de la presa de Buseo, la única de titularidad de la Generalitat Valenciana, no deja de ser otro 'punto caliente' de la catástrofe pues, aguas abajo, en el municipio de Sot de Chera, fallecieron un padre y su hijo como consecuencia de las inundaciones que provocaron el colapso de su edificio. De ahí que algunas de las indagaciones de la jueza de la Dana vayan dirigidas a investigar la gestión de la presa.

Los informes aportados por la Generalitat Valenciana a la causa revelan que el embalse alcanzó la cota de aliviadero y empezó a verter agua sobre las 21.45h de aquella noche y apenas 25 minutos después, el embalse alcanzó la cota de coronación. Es decir, se desbordó y empezó a verter por encima. Pero lo cierto es que la empresa gestora de la infraestructura -la gestión está privatizada- avisó hora y media antes del peligro de desbordamiento a causa de las intensas lluvias que se estaban registrando.

Este martes, el técnico de la compañía Typsa pasó a declarar como testigo ante la jueza de la Dana y aseguró que remitió un correo electrónico a las 20.41h "dirigido al titular, el director de la explotación y en copia a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ)" donde exponía los datos de caudales que estaban entrando al embalse y alertaba de una previsión de desbordamiento en tres horas y media por el aliviadero lateral. Envió el mensaje y se fue directo a la presa: "Tardaré en llegar, en la presa hay poca cobertura", advirtió en el correo electrónico, al que ha tenido acceso este diario.

El intenso temporal, que descargó más de 400 litros por metro cuadrado en la zona de la presa aquel día, superó las previsiones y el caudal que salió de la presa desde que empezó a verter pasó de 200 a más de 900 metros cúbicos por segundo. El informe aportado en su momento por la administración autonómica revela que "se alcanzó un vertido de unos 2,5 metros por encima de coronación" y que el caudal punta de salida pudo alcanzar los 1.100 metros cúbicos por segundo. Entre la documentación aportada por la Conselleria de Emergencias también figuran los avisos que fue dando la CHJ por los elevados datos de pluviometría, que se intensificaron sobre todo entre las 18h y las 22h del día 29 de octubre.

Pero la jueza de la Dana ha constatado sobre todo "la preocupación de los responsables de la presa de Buseo por la situación de la misma", sobre todo por los correos remitidos a partir de las 23h de la noche, tal como publicó Valencia Plaza. En el primero, ya se advertía de que era "probable" que la presa estuviera "vertiendo por coronación", es decir, que el agua estuviera rebosando por encima y que el caudal aguas debajo fuera "elevado". Una información que, según la jueza "fue conocida" en el centro de emergencias del 112, donde anotaron en el sistema interno que "posiblemente" había "vertidos elevados".

A las 0.10h de la madrugada del día 30 de octubre, el técnico informó "nuevamente" tanto al 112 como a la CHJ con datos que se habían obtenido dos horas antes y según los cuales se había "superado la cota de coronación de la presa". El mensaje explicaba que la presa tenía "un punto de debilidad" en el estribo de la margen izquierda, que en 1957 sufrió una brecha y el técnico, advertía, no podía determinar su estado, aunque dejaba claro que "su situación no es buena". En ese sentido, el empleado de Typsa era contundente: "Se debería avisar a Sot de Chera para que traten de desalojar la parte baja del pueblo".

A las 1.05h, apenas una hora después, el trabajador remitió otro tanto al 112 como a la CHJ, informando de que seguían intentando llegar a la presa y comunicar con el personal de presa "sin éxito", se reiteraba sobre la posible coronación y los niveles de caudal en el embalse e insistía: "Es probable que se haya superado el umbral límite (que corresponde a un estado de emergencia número 3 [...])". Aun así, la realidad es que el departamento de Emergencias, centrado aquella tarde y noche en la presa de Forata y otras inundaciones en l'Horta Sud, no activó ningún aviso hasta las 9.15h, cuando activó la emergencia por el Plan de Presa.

Todas estas comunicaciones no sirvieron para que Emergencias advirtiera a la población aguas abajo de la presa, y llegaron tarde a juzgar por las declaraciones de los testigos. La mujer que perdió a su hijo y a su marido en Sot de Chera declaró que a las 20h de la tarde, las calles ya eran "ríos" y que fue después de irse a dormir a als 22.15h, cuando su marido le llamó "gritando diciendo que entraba agua en la vivienda". Entraban "bocanadas de barro" e hizo una foto a las 22.45h y tras romperse los cristales, "en menos de cinco y diez minutos se llenó toda la planta". Su pareja "se fue al balcón y de repente se cayó la mitad de la finca", provocando el fallecimiento también del hijo. "Nadie nos avisó de la crecida", declaró.

La comisión de investigación de la Dana ha citado para que comparezca el conseller de Agricultura y actual portavoz del Consell, Miguel Barrachina, quien el pasado viernes se escudó en que la gestión de la presa de Buseo está privatizada y señaló al presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), Miguel Polo, por ser el que preside el comité permanente de gestión de esta instalación, para dar las explicaciones relativas al día de la Dana. "La información la tiene que dar él", indicó.

Sin embargo, como publicó este lunes Valencia Plaza, un informe de la CHJ aportado hace meses a la causa señala a la administración autonómica como eje fundamental en los canales de comunicación en la emergencia. El organismo de cuenca cita el Plan de Emergencia de la presa para sostener que la comunicación se centraliza "en una sala de control que deberá disponerse para tal fin en la oficina de explotación de la Generalitat Valenciana", de modo que el flujo de información ha de seguir un diagrama aportado en el mismo documento y que señala a la Generalitat Valenciana como ente canalizador de esta información.

"¿Por qué no se dijo nada, ni mu?"

La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, exigió este martes al conseller de Agricultura que aclare "por qué no se dijo nada, ni mu", de la presa de Buseo en el Cecopi durante el día de la dana, cuando recordó que él es "el máximo responsable" de esta presa y que por su desbordamiento "murieron siete personas". "Tendrá que explicar qué estaba haciendo y por qué no avisaron, por qué no advirtieron, por qué no pusieron el nivel 2 en la presa de Buseo hasta el día 30. ¿Qué estaban haciendo? ¿Es otro más despreocupado de los que estaban en el gobierno el 29 de octubre? Pues sí, ahora resulta que tenemos otro despreocupado más y hoy es el portavoz del nuevo gobierno de Juanfran Pérez Llorca", dijo Bernabé.

Preguntada por si a ella le llegó esta información y por si en el Cecopi se trató, garantizó que "desde luego" a todos los que estaban conectados esa tarde al Cecopi "nadie" les "dijo nada de la presa de Buseo en las horas críticas". "Ahí no se dijo ni mu, ni una sola información sobre la presa de Buseo", aseveró Bernabé, para advertir de que "este no es un tema menor". Asimismo, insistió en que el técnico de Typsa que avisó, lo hizo "por datos públicos que estaban en el SAIH", el Sistema Automático de Información Hidrológica de la CHJ, "que son los datos que debe manejar el responsable de la emergencia y que son los datos que el máximo responsable de la presa de Buseo debía haber advertido a Emergencias de la Generalitat".