ALICANTE. El acuerdo a tres bandas alcanzado entre el ente Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), la Autoridad Portuaria y el Ayuntamiento de Alicante en enero para habilitar un nuevo ramal hasta la la terminal de mercancías como manga de maniobras que permitirá retirar las vías de Benalúa en desuso conllevará una profunda remodelación del acceso sur a la ciudad: la denominada Operación Integrada número 3 (OI/3) que el equipo de gobierno (el bipartito compuesto por Partido Popular y Ciudadanos) pretende ajustar ya para forzar a Adif a acelerar la desafección de las vías. Es más, el edil de Urbanismo, Adrián Santos Pérez (Ciudadanos) ya mantuvo una última reunión el pasado martes con responsables de Adif para agilizar ese proceso.

El cambio más evidente será el desplazamiento del trazado de la actual avenida de Elche hacia terrenos enclavados entre los límites del recinto portuario, como se establece en su propio Plan Especial desde los años noventa. No obstante, para que eso sea posible, debe procurarse antes otra transformación previa que conformará un nuevo nudo de comunicaciones en el entronque entre la avenida de Elche y la calle México. 

Se trata de la construcción de una nueva rotonda que quedará posicionada bajo el puente que permite el acceso directo al Puerto desde la autovía A-31 para organizar los flujos de tráfico que confluyen en ese cruce. Fuentes consultadas precisaron que tendrá un coste estimado de dos millones y que será el punto de partida del nuevo trazado de la avenida de Elche por el interior del Puerto hasta conectar con la prolongación de Óscar Esplá y la avenida de Loring.

En ese punto, además, debe incluirse la construcción de un paso subterráneo para que los vehículos puedan acceder de forma directa hasta la dársena pesquera, sin necesidad de llegar a la actual rotonda de la calle México para tomar el puente que prolonga el recorrido desde la A-31. Esa es, de hecho, la principal exigencia manifestada por la Autoridad Portuaria para amparar la construcción del nuevo ramal ferroviario en paralelo a las vías que ya llegan hasta la terminal que opera TMS. Y, a su vez, esa es la condición indispensable que plantea Adif como primer requisito para eliminar las vías que conducen hasta la antigua estación de Murcia, hoy reconvertida en sede de Casa Mediterráneo, con el propósito de ampliar la zona verde actual.

Convenio específico

Es más, Adif ya ha planteado que el primer paso para que la operación pueda prosperar debe ser la firma de un acuerdo trilateral (Adif, Puerto y Ayuntamiento) en el que quede reflejada la construcción de ese nuevo ramal ferroviario. En principio, se prevé que en ese acuerdo se regule el reparto de costes, de modo que cada administración asuma la inversión necesaria para procurar las infraestructuras que reclama. Así, Adif asumiría las obras de su ramal; el Puerto, la construcción del paso soterrado bajo el trazado de las vías; y el Ayuntamiento, la ejecución de la rotonda en el entronque entre la calle México y la avenida de Elche.