ALICANTE. El Ayuntamiento de Alicante opta por la previsión y dobla el presupuesto destinado a la reparación de aceras en la convocatoria del nuevo concurso para externalizar el servicio. En concreto, la licitación parte con un presupuesto de 8 millones, según el acuerdo aprobado este martes en la reunión semanal de la Junta de Gobierno, frente a los 4,1 millones por los que se adjudicó el contrato precedente, en el año 2021. El nuevo concurso reproduce, eso sí, la misma duración que la prestación previa: cuatro años de vigencia adicional, aunque con posibilidad de que pueda concederse un año de prórroga.
¿Qué habría motivado el incremento presupuestario? Los portavoces del equipo de gobierno, Cristina Cutanda y Manuel Villar, han indicado que se habría estimado necesario incrementar la inversión destinada a sufragar reparaciones en los espacios públicos, sin llegar a valorar si la contrata precedente se activó con un presupuesto que hubiese resultado insuficiente para atender los arreglos ejecutados durante los cuatro años de prestación.
En este sentido, la concejala de Infraestructuras, Cristina García, ha destacado, a través de un comunicado, que "con este nuevo y ambicioso contrato podremos prestar un mejor servicio y dar una respuesta más ágil al mantenimiento de la ciudad en las condiciones que todos queremos". "Se trata de un servicio fundamental y nuestro objetivo es que cumpla con las necesidades y exigencias de Alicante. Además, tanto por cuantía como por volumen uno de los más importantes de la concejalía de Infraestructuras", ha añadido la edil.
El servicio sale a licitación con el objetivo de concertar un contrato mixto de obra y servicio para llevar a cabo las actuaciones de mantenimiento y reparación de aceras, pavimentos en plazas, espacios públicos y demás elementos complementarios de las vías públicas municipales. Los trabajos consistirán básicamente en la subsanación de deficiencias en estos espacios, así como en los diferentes elementos complementarios estructurales y ornamentales de la vía pública, al tiempo que prevé mejorar las condiciones básicas de accesibilidad y no discriminación para el acceso y utilización de los espacios públicos urbanizados, según detallan fuentes municipales.
Las incidencias de carácter, menor como pueden ser una arqueta rota, un bordillo suelto o un pequeño tramo de acera deteriorado que no requieran de estudio, diseño y valoración previa, podrán ser iniciadas en menos de 24 horas. Por ello, el pliego incluye que la adjudicataria deberá disponer de los equipos necesarios para atender las órdenes de trabajo todos los días de la semana. En este sentido, la empresa deberá disponer siempre de seis equipos activos con el equipamiento de vehículo, herramienta y pequeña maquinaria para los quehaceres diarios, según las mismas fuentes. Además, se determinará el grado de afectación a la seguridad de la vía pública de la deficiencia detectada y en función del mismo se deberá subsanar en distintos plazos que van desde las 4 horas hasta los 15 días.