ALICANTE. La Dirección General de la Costa y el Mar ultima la tramitación administrativa para abordar las obras de restauración del litoral sur de Alicante, en el tramo ribereño del Saladar de Aguamarga comprendido entre la Cala de los Borrachos y el norte de Urbanova, antes de que concluya 2025. Cuando menos, así se pone de manifiesto en la respuesta facilitada por el Gobierno a la pregunta parlamentaria formulada por el diputado de Sumar, Txema Guijarro, en la que inquiría sobre el momento concreto en el que se pretendía ejecutar esa actuación. La contestación no alude a ninguna fecha específica, pero sí apunta como contexto temporal el objetivo de que la intervención pueda iniciarse "antes de finalizar el año en curso". 

En este sentido, la respuesta del Ejecutivo señala que la realización de esos trabajos "se encuentran en los estadios finales de la fase de licitación, y está propuesta ya su adjudicación". Además, se añade que "al no haberse formalizado el contrato, aún no es posible avanzar una fecha de inicio de los trabajos", aunque sí se apunte como propósito que las obras puedan arrancar antes de 2026.

Lo cierto es que la adjudicación quedó aprobada a principos del pasado mes de julio, como informó este diario. La mesa de contratación de la Dirección General de la Costa y el Mar seleccionó la propuesta presentada por la compañía murciana Eneas Servicios Integrales, que concurrió al concurso junto a otras seis empresas. La oferta de Eneas fue considerada la más ventajosa para el interés público con una oferta de 268.888,89 euros (impuestos incluidos), en una licitación que había quedado convocada en marzo con un presupuesto de salida de 341.126 euros (también con impuestos incluidos). La formalización del acuerdo se produjo el 24 de julio por lo que, en principio, la intervención tendría ahora el camino despejado. Y, de hecho, fuentes de la Subdelegación del Gobierno señalan que los trabajos podrían comenzar el miércoles de esta misma semana. Así, el subdelgado en Alicante, Juan Antonio Nieves, ha destacado que esta actuación impulsada por el Gobierno de España busca "recuperar la fachada marítima ahora degradada y transformarla en un espacio público abierto, recuperando al mismo tiempo los valores ambientales y paisajísticos de la zona".

¿En qué consiste la actuación diseñada por Costas? Como informó este diario en abril, comprende la restauración ambiental y la renaturalización del pasillo costero que limita hacia el oeste con el Saladar de Aguamarga y la carretera de Urbanova, y hacia el este con la Playa de Aguamarga. Con el proyecto, se pretende recuperar el sistema dunar, eliminar vegetación invasora, renovar el vallado actual por otro blando que procure la protección del espacio, además, de promover el desmontaje de infraestructuras y edificaciones en desuso para favorecer la recuperación natural de los espacios de playa.

Protección del dominio público

Todo ello con el propósito de propiciar la protección del dominio público marítimo terrestre, de favorecer su uso y disfrute público, y de recuperar sus características naturales modificadas por la introducción de actividades impropias, según recoge el propio proyecto, que se divide en dos tramos. En el tramo sur se abordará la rehabilitación de la gola o canal de entrada a la antigua explotación salinera, lo que incluye su limpieza, la reconstrucción de sus márgenes laterales de mampostería y la de del pretil superior de la carretera de Urbanova. Además, también se dispondrá de señalización divulgativa sobre la antigua explotación salinera.

Por su parte, en el espacio contiguo a Urbanova, el proyecto contempla la limpieza y naturalización de los terrenos que vienen utilizándose como zona de aparcamiento de modo que quede integrado "de forma natural con la playa existente". Al tiempo, se plantea la recuperación completa del cordón dunar, lo que abarca la eliminación de plantas invasoras, la plantación de especies existentes e interesantes desde el punto de vista ecológico y la instalación de captadores de mimbre y de un vallado blando, según reseña el proyecto.

Para el desarrollo del conjunto de la actuación se contempla un plazo de ejecución máximo de un año, lo que no implica que vaya a consumirse, puesto que podría ejecutarse en un tiempo menor. Es, de hecho, lo que sucedió en otra de las actuaciones ya desplegadas por Costas en otro punto del litoral de Alicante: la playa del Cocó. En ese caso, el proyecto comprendía la construcción de un nuevo espigón que sustituyese el preexistente con el fin de favorecer la regeneración de la playa con un ancho de arena estable que permitiese su disfrute por parte de la ciudadanía. Esos trabajos concluyeron a finales de mayo, cerca de un mes antes de lo previsto.