ALICANTE. La planificación trazada por la Autoridad Portuaria de Alicante para prolongar el dique de Levante con el proposito de ampliar las capacidades de atraque de cruceros en la terminal marítima del muelle 14 no caerá en saco roto. Como mínimo, el concurso convocado para concertar la redacción del proyecto de esa prolongación, mediante la construcción de dos dolphines o duques de alba, ha atraído a cuatro estudios de ingeniería interesados en asumir su diseño, lo que garantiza el desarrollo de la infraestructura pretendida sin la demora que habría supuesto la resolución de la convocatoria sin la concurrencia de licitadores.

En realidad, la convocatoria partió con cinco aspirantes: Ingeniería y Estudios Mediterráneo, Ingeniería Avanzada de Obras Marítimas, Ingeniería Especializada Obra Civil e Industrial, TPF Getinsa Euroestudios y WET Ingeniería Hidráulica y Marítima, según pudo concretarse al cierre del plazo para la presentación de ofertas. No obstante, la propuesta presentada por Ingeniería y Estudios Mediterráneo ya ha quedado descartada, tras la fase de evaluación de los criterios que dependen de juicio de valor, al no haber superado los 36 puntos de valoración mínima exigida en las bases del concurso en ese estadio de la licitación. En principio, tras el cierre de ese primer análisis, la propuesta que partiría con ventaja inicial con una mayor puntuación sería la presentada por Ingeniería Avanzada de Obras Marítimas, con 55 de 60 puntos posibles, seguida de Ingeniería Especializada Obra Civil e Industrial. A partir de ahí, los técnicos del Puerto deben valorar las propuestas económicas y escoger la alternativa más ventajosa. La licitación partía con un presupuesto de 165.000 euros (impuestos incluidos) y un plazo de ejecución de siete meses, de modo que, como pronto, la contratación de las obras para abordar la ejecución de esa infraestructura quedaría demorada hasta mediados de 2026.

¿En qué consiste en concreto esa prolongación del dique? De acuerdo con la memoria del proyecto precisada en la convocatoria dle concurso, se pretende habilitar otros 60 metros de línea de amarre en el muelle 14 mediante la incorporación de los dos duques de alba ya citados: dos estructuras aisladas formadas por pilotes enclavadas en el fondo marino y una losa en el nivel de superficie concebidas para permitir el amarre de buques. De hecho, el fin último perseguido es, precisamente, ampliar las dimensiones actuales de ese muelle mediante esas dos extensiones, puesto que su tamaño actual se considera limitado para favorecer un atraque accesible de dos buques turísticos de forma simultánea. Así, la Autoridad Portuaria pretendería mejorar esa disponibilidad de metros, toda vez que las escalas dobles vienen registrándose cada vez con mayor frecuencia.

Sin ir más lejos, en la programación de 104 escalas calendarizadas para este 2025, se incluye la previsión de hasta 17 amarres dobles, con dos barcos atracados en una misma jornada. Al tiempo, el proyecto debe facilitar el amarre de buques de mayor tamaño, lo que multiplica las posibilidades de que navieras que operan con embarcaciones con capacidad para más de 4.000 pasajeros puedan incluir el Puerto de Alicante en sus recorridos turísticos por el Mediterráneo, lo que multiplicaría las visitas turísticas y el retorno económico en Alicante y en el conjunto de municipios de la Costa Blanca en los que los cruceristas realizan excursiones. Por lo pronto, según el último estudio de impacto del sector, promovido por la asociación Alicante Costa Blanca por el Turismo de Cruceros (ALCTC) cifra en más de 65,6 millones ese impacto en la provincia.

Estudios previos y ampliación paralela

Y eso no es todo. Con la ejecución de esa prolongación también se aspira a acondicionar otros 45 metros de muelle para el atraque de las embarcaciones de prácticos y amarradores, según detalla la misma memoria. Por último, como informó este diario, el estudio que resulte seleccionado para diseñar esa ampliación deberá elaborar los estudios previos requeridos para su construcción, entre los que se incluye un informe geotécnico, un estudio de la cartografía y la topografía de la zona de actuación, así como un informe sobre la batimetría y el efecto de las corrientes y el oleaje. Además, se requiere otro estudio prospectivo sobre la posible incidencia que pueda conllevar el cambio climático, así como la presentación de al menos tres alternativas para la ampliación de la línea de amarre.

A la espera de que se delimite la redacción del proyecto, se estima que la prolongación propuesta requiera de un desembolso de más de un millón que la Autoridad Portuaria pretende cubrir con fondos propios, sin renunciar a otras vías de financiación externa como la disponibilidad de ayudas de la Unión Europea. Su ejecución se suma, además, al proyecto que se acaba de promover en paralelo para completar el muelle 19, en el dique de Poniente, en una actuación con la que también se pretende ganar capacidad para el amarre de buques de grandes esloras y potenciar el tráfico de mercancías. En concreto, se aspira a disponer de otros 443 metros de línea de atraque con una inversión que se calcula en más de 30 millones. En este caso, el concurso para contratar la redacción del proyecto parte con un presupuesto de 605.000 euros (impuestos incluidos) y un plazo de ejecución de un año.