ALCOY. El comité de huelga de Automóviles La Alcoyana ha anunciado que mantienen la huelga para los días 20 y 21 de noviembre e indefinida a partir del 9 de diciembre, si no hay acuerdo, en el servicio comarcal en l'Alcoià y el Comtat (Busco), así como en la línea entre Alcoy y Alicante, y "denunciamos la constante vulneración de nuestros derechos laborales y nuestro legítimo derecho a la huelga", apuntan desde la CGT en un comunicado, en el que indican que "la empresa y la administración pública están boicoteando sistemáticamente nuestras acciones". Hasta ahora se han celebrado tres jornadas de huelga.
Desde la CGT remarcan que “la situación laboral es insostenible: nuestros conductores soportan niveles de estrés muy altos, afectando a la seguridad del transporte de pasajeros. El absentismo roza el 50%", a lo que añaden que "recordemos que transportamos vidas humanas y necesitamos condiciones de trabajo dignas para garantizarlo".
En cuanto a la empresa Vectalia, que es la que presta el servicio, aseguran que "afirma estar abierta al diálogo, pero miente. Desde la ruptura de negociaciones no ha habido ningún acercamiento ni voluntad de negociación colectiva. Su postura es clara, que es forzar a la plantilla hasta el límite”. Aseguran que "a diario incumplen los contratos de emergencia firmados con la Generalitat, dejando a decenas de personas en las paradas, utilizando autobuses con más de 10 años y modificando horarios, itinerarios y paradas a su antojo. Las únicas medidas reales han sido impuestas por la Inspección de Trabajo y los tribunales".
Junto a esto, hacen hincapié en que "la Generalitat se niega a reunirse con los trabajadores, alineándose abiertamente con la empresa y dejando de lado nuestra voz", a la vez que apuntan que "la empresa bloquea espacios públicos y niega el acceso del Comité a las instalaciones, impone servicios mínimos al 80%, y presiona a los compañeros con menos antigüedad, insinuando posibles represalias como la no renovación de contratos. Los servicios mínimos reales alcanzan el 90%, dejando en evidencia la presión ejercida sobre la plantilla". Junto a ello, apuntan que "confiamos en que las instituciones políticas cumplan su compromiso y el alcalde, Antonio Francés, medie para garantizar un transporte de viajeros digno".