VALÈNCIA. Lorenzo Noguera Fabra no solo estudió en el mismo colegio que su admirado escritor Vicente Blasco Ibáñez, sino que durante toda su vida adoró la vida y obra del escritor valenciano. Tras la muerte de este admirador, su familia ha recuperado unas carpetas que depositó hace quince años en una notaría y en las que hay cerca de 150 documentos (la mayoría desconocidos o inéditos) del autor de Cañas y barro y La barraca. Entre la documentación han aparecido dos auténticos tesoros: un fragmento relato-reportaje titulado El rastrillo y situado en la I Guerra Mundial (una hipótesis es que fuera parte de la nonata novela El quinto jinete, que Blasco anunció en sus últimos años de vida) y parte de otra novela, ambientada en Murcia, de la que faltan páginas. Nuestra colaboradora Margarita Morales Esparza ha sido la primera en tener acceso al legado desconocido del escritor y político y explica, en exclusiva para los lectores de Plaza, su importancia histórica.