Tres buques turísticos amarrados de manera simultánea en el Puerto de Alicante. Foto: RAFA MOLINAALICANTE. La terminal de cruceros de Alicante, gestionada por Costablanca Portuaria, transita ya en la confianza en la recuperación ante la persistencia de 30 escalas de buques turísticos confirmadas para la segunda mitad de este año, después de sufrir cerca de quince meses sin registrar ninguna actividad. Y no solo eso. Además, se cuenta con la previsión de que puedan producirse otros 60 amarres a lo largo de 2022, en función del calendario de visitas que se ha podido programar hasta el momento. Se trata de hecho, de la misma cifra de escalas que se había registrado para el ejercicio de 2021, como informó Alicante Plaza, pero que no ha podido cumplirse hasta ahora ante la prohibición que sigue vigente para los atraques de cruceros en España.
Así, esas nuevas llegadas siguen supeditadas a que el Gobierno central levante las restricciones y vuelva a autorizar el tráfico marítimo internacional para que puedan restablecerse los recorridos turísticos que llevan suspendidos desde marzo de 2020. En principio, Costablanca Portuaria trabaja con la previsión de que esa autorización pueda acordarse para el mes de julio, toda vez que el control de la pandemia y el avance de la vacunación ya ha llevado a varios gobiernos autonómicos -entre ellos, el de la propia Comunitat Valenciana- a establecer los primeros protocolos sanitarios para permitir escalas de buques turísticos. Eso sí, solo los que cubran recorridos nacionales, lo que supondría la recepción de cruceros en la modalidad de cabotaje.
Así, según las mismas fuentes, ya se ha contactado con varias navieras con la intención de que puedan organizar itinerarios nacionales, con escalas en los puertos de València, Alicante, Cartagena o Málaga, por ejemplo. Sin embargo, existen dudas de que el planteamiento pueda resultar suficientemente atractivo para las compañías (y para sus clientes) cuando se augura que, a un mes vista, puedan recuperarse los recorridos internacionales tradicionales por el Mediterráneo desde los puertos de Italia, Francia o Malta.
Por el momento, de levantarse la prohibición, esas nuevas llegadas que siguen confirmadas podrían reactivarse a partir del 3 de junio, cuando sigue programada la escala del buque Insignia, de Oceania Cruises. A esa visita le seguiría el Mein Schiff Herz de Tui Cruises, el 14 de julio. Y, después, el Seadream de Seadream Yatches, el 21; y el Rotterdam de Holland America, ya para el 10 de agosto.
En todo caso, las mismas fuentes indicaron que la confirmación del interés de las grandes empresas armadoras por recalar en Alicante después de más de un año de paralización invita al optimismo para que pueda recobrarse el volumen de visitas previo a la crisis sanitaria en el margen de un año. Es más, indicaron que esa fidelidad en el interés por Alicante podría ser un síntoma favorable para lograr que alguna de esas navieras instale en la ciudad el puerto base para alguno de sus viajes turísticos: un objetivo por el que se viene trabajando desde el año 2017, cuando Pullmantur abogó por un cambio de itinerarios y optó por trasladar el puerto base que había implantado en Alicante dos años antes.
La terminal sigue negociando la implantación de un puerto base, después de que el proceso de liquidación en el que se haya inmerso Pullmantur truncase el preacuerdo que se había alcanzado a finales de 2019
Por lo pronto, se trata de uno de los objetivos que mantiene la Asociación Alicante por el Turismo de Cruceros, en el que seguirá trabajando después de cuatro años de actividad y de que se produzca la renovación de su junta directiva. En principio, la asociación prevé celebrar este lunes la asamblea para acordar esa renovación, en la que se confirmará la continuidad del director de operaciones de la terminal de cruceros de Alicante, Francesco Balbi, como presidente, al haberse registrado una candidatura única. Junto a él, en dicha candidatura figuran Jorge Rodríguez, en representación de Esatur XXI, SL, como vicepresidente; Esperanza Parodi, como secretaria; Josefa Pérez, en representación de Autocares Carcelén, como tesorera; y Agustina Nogueroles, Jonathan Delgado, José Pedro García, Alexandra Marín; María Teresa Rubio y Ángel Rodríguez, como vocales.
Lo cierto es que ya existe un camino andado en ese propósito de lograr el puerto base. Según las mismas fuentes, ya se había alcanzado un principio de acuerdo que se venía negociando desde 2019 para que la propia Pullmantur volviese a apostar por Alicante como punto de partida de sus recorridos. No obstante, la confirmación de esa decisión -que pretendía anunciarse en 2020- quedó suspendida con la irrupción de la pandemia y ya se da por descartada, en la medida en que la compañía no ha podido resistir el impacto de la crisis sanitaria y se encuentra ahora en fase de liquidación, tras declararse en concurso de acreedores.
La propia CostaBlanca Portuaria también se encuentra en situación concursal, aunque no se contempla su liquidación. De hecho, pidió la declaración de concurso voluntario con el fin de poder superar la actual situación de inactividad que ha impedido la generación de ingresos, con la previsión de que pueda reequilibrar sus balances en cuanto vuelva a restablecerse el mercado de cruceros.
