ALICANTE. El bipartito de Alicante (PP y Cs) atiende a las advertencias sobre la existencia de cierta arbitrariedad en los mecanismos de justificación apuntadas por el interventor municipal en varios de sus informes de fiscalización económica y trata de poner orden en las condiciones para la concesión de ayudas y subvenciones a colectivos festeros con la aprobación de un reglamento específico. Ese nuevo marco regulador debe quedar aprobado en la Junta de Gobierno del próximo martes, según avanzó el propio edil de Fiestas, Manuel Jiménez (PP), durante el desarrollo del pleno ordinario de junio, este miércoles.
En concreto, con ese reglamento se pretende delimitar los requisitos que deben cumplir las entidades vinculadas a las celebraciones tradicionales de la ciudad para poder optar a esas ayudas, así como los procedimientos para justificar su gasto una vez obtenidas. De igual modo, según fuentes consultadas, con ese nuevo sistema, se diferencia entre las subvenciones nominativas que se conceden año tras año a los colectivos que asumen labores organizativas en los festejos (como la Federació de Fogueres por ejemplo), de las ayudas que se conceden a través de convocatorias abiertas a las distintas entidades que participan en las fiestas de barrio, en les Fogueres, en los Moros y Cristianos o en la Semana Santa.
En suma, el nuevo documento técnico trata de zanjar dudas clarificando requisitos, al tiempo que se puedan eliminar disparidades a la hora de certificar el gasto realizado con esas subvenciones, con la entrega de documentación que lo acredite. No es una cuestión menor, ya que en el presupuesto municipal de este ejercicio, se incluye una consignación de 1,16 millones para el reparto de esas ayudas, lo que representa un incremento del 5,43% respecto a la cantidad consignada en 2020.
De hecho, en el informe de fiscalización de las cuentas de este año, el interventor municipal apuntó una de sus últimas advertencias sobre las ayudas a los colectivos festeros para señalar, respecto al incremento de los fondos previstos a ese fin tras un año en el que la mayoría de las fiestas no habían podido celebrarse, que solo podrían subvencionarse "los gastos debidamente acreditados y no recuperables derivados de las medidas previstas en la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el covid-19", como establece el Decreto 463/2020, así como el artículo 14 del Real Decreto Ley 17/2020.
Con ese reglamento, el equipo de gobierno aspira a completar la organización del sector, en el que también se encuentra en trámite de aprobación la nueva Ordenanza de Fiestas. En principio, todo parece indicar que esa normativa podría quedar aprobada en el pleno de julio, tras el estudio de las enmiendas registradas por el conjunto de los grupos de la oposición. Entre ellas, como informó Alicante Plaza, figuraría la solicitud de retirar la exigencia de un certificado de estabilidad a los artistas constructores de los monumentos de Fogueres, además de la inclusión de representantes de todos los grupos políticos representados en la corporación en la composición de los jurados de los concursos públicos relacionados con los festejos.