ALICANTE. El Ayuntamiento de Alicante trata de avanzar en su propuesta de implantación de una Zona de Bajas Emisiones (ZBE) en la ciudad antes de finalizar 2023. Así, el equipo de gobierno (el bipartito conformado por PP y Cs), ha aprobado este martes en Junta Local su adhesión al programa de ayudas del Plan de Recuperación, Transformación y Resilencia del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, a partir de una propuesta en la que se incluye la presentación de 14 proyectos valorados en más de 37 millones de euros de los que espera recibir el máximo de la subvención posible que alcanza los 29,5 millones, según han concretado fuentes municipales, a través de un comunicado.
En principio, la ejecución definitiva de esas medidas y el calendario concreto en el que podrían desarrollarse quedan condicionados a la obtención de esos fondos, aunque algunas de esas iniciativas ya estaban contempladas en los presupuestos municipales de 2021 y se prevé que puedan llevarse a efecto entre finales de este año y 2022. Sería el caso, por ejemplo, de la primera fase de la peatonalización del Centro. Otras, como la compra de autobuses eléctricos, queda incorporada a través de la nueva licitación del servicio, pendiente de que se apruebe la convocatoria del concurso.
En cualquier caso, el concejal de Presidencia, Modernización y Coordinación de Proyectos, Toño Peral, ha explicado, a través de un comunicado, que "como apuntó el alcalde, Luis Barcala, en la presentación de estos fondos, el Ayuntamiento de Alicante es plenamente consciente de la necesidad de avanzar hacia un modelo de movilidad urbana segura, sostenible, saludable, accesible y conectada para hacer de Alicante una ciudad más habitable, acorde con el modelo de movilidad mediterráneo asociado al disfrute de la ciudad y del entorno, en el marco del mayor respeto posible por la seguridad, los recursos energéticos y la calidad del entorno urbano y del medio ambiente".
"Este proceso pasa por seguir avanzando en el cambio de hábitos que ya se estaban produciendo en los desplazamientos urbanos, con la promoción y fomento del transporte público colectivo, así como de los desplazamientos individuales, a pie, en bicicleta y en vehículos de movilidad personal frente al vehículo privado motorizado, altamente contaminante, con el objetivo de que la movilidad urbana más segura, sostenible, saludable y accesible para todos sea una realidad en nuestra ciudad", ha recalcado el responsable de Coordinación de Proyectos.
Por lo que respecta a la propuesta de ZBE concreta, fuentes municipales han detallado que se pretende configurar en dos anillos: uno exterior, que se define por la Gran Vía, como arteria principal de distribución de tráfico en la ciudad y todo el frente Litoral, con una superficie aproximada de 750 Ha, y otro ligado al centro urbano y de servicios, denominado Centro Tradicional y que incluye el Casco Histórico, que se configura por Alfonso El Sabio, Doctor Gadea y Federico Soto, con una superficie aproximada de 54 Ha. Tanto en el primer como en el segundo anillo, "las limitaciones se implantarán de forma progresiva, estableciéndose un calendario de restricciones vinculado a elementos contaminantes", según han confirmado los portavoces del equipo de gobierno, Antonio Manresa y Manuel Villar, en su comparecencia habitual para dar cuenta de los asuntos tratados en Junta Local.
El acuerdo contempla que se tendrá implantada una Zona de Bajas Emisiones en 2023, sin perjuicio del cumplimiento de los plazos establecidos en la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, y que se dispondrán de los recursos tanto técnicos como financieros necesarios para garantizar el mantenimiento y operación de la actuación subvencionada tras su puesta en marcha y durante al menos los primeros cinco años de actividad. El acuerdo de adhesión cuenta con el respaldo de los proyectos impulsados desde las áreas que dirigen los concejales de Medio Ambiente, Transporte y Accesibilidad, Manuel Villar; Tráfico y Movilidad, José Ramón González, y Coordinación de Proyectos, Antonio Peral.
Las limitaciones, entre las que se incluye un sistema de control de accesos al Centro o las restricciones de carriles, se implantarán de forma progresiva
Así, el comunicado incide en que el conjunto de actuaciones contempladas en el proyecto de ZBE suman un importe de 37.344.393,31 euros, siendo subvencionable un total 29.470.954 euros. En realidad, varias de ellas ya están contempladas al menos desde mediados del pasado mandato y es ahora cuando, en parte, se pretende llevar a la práctica, como sucede con la peatonalización del eje Constitución-Bailén, en fase de licitación de las obras. Las actuaciones, por tipologías, que se pretenden financiar son:
- Implantación de Zona de Bajas Emisiones en Alicante, Anillo Gran Vía, por un importe estimado de 3.000.000 euros, siendo subvencionables 2.700.000 euros.
- Regulación y control de accesos Centro tradicional, Rambla de Méndez Núñez y Casco Antiguo, por un importe estimado de 1.500.000 euros, siendo subvencionables 1.350.000 euros.
- Acondicionamiento de Avenida de Aguilera para implantación de carril bus exclusivo, por un importe estimado de 600.000 euros, siendo subvencionables 540.000 euros.
- Proyecto de construcción de peatonalización del Eje Constitución-Bailén-Bilbao, por un importe estimado de 1.949.126 euros, siendo subvencionables 1.754.213 euros.
- Acceso peatonal a la Explanada por las calles Bilbao y Rambla, por un importe estimado de 2.500.000 euros, siendo subvencionable 2.250.000 euros.
- Peatonalización de la Plaza Nueva y entorno (calles Navas y Susana Llaneras), por un importe estimado de 593.631 €, siendo subvencionables 534.268 euros.
- Restricciones de carriles en avenida Ramón y Cajal, por un importe estimado de 1.487.603,31 euros, siendo subvencionables 1.338.843 euros.
- Restricción del tráfico y control de accesos en avenida Doctor Gadea, Paseo Soto y Avenida General Marvá, por un importe estimado de 4.000.000 euros, siendo subvencionables 3.600.000 euros.
- Restricción de tráfico del Paseo de los Mártires de la Libertad, por un importe estimado de 2.500.000 euros, siendo subvencionables 2.250.000 euros.
- Regulación de la DUM en zona de bajas emisiones en Anillo Gran Vía, por un importe estimado de 250.000 euros, siendo subvencionables 2.250.000 euros.
- Adquisición de vehículos eléctricos de Transporte Público, por un importe estimado de 11.960.000 euros en la compra de autobuses, siendo subvencionables 4.600.000 euros.
- Instalación de sistemas de recarga de autobuses eléctricos en cocheras municipales, por un importe estimado de 3.152.279 euros, siendo subvencionables 2.837.051 euros.
- Digitalización de Transporte Público con pago y SAE vinculado a “Alicante se mueve”, por un importe estimado de 3.551.754 euros, siendo subvencionables 3.196.579 euros.
- Monitorización y simulación de transportes multimodales en el centro de Alicante con la app MaaS, por un importe estimado de 300.000 euros, siendo subvencionables 270.000 euros.
Las mismas fuentes han incidido en que "son numerosas las actuaciones que este Ayuntamiento, a través de las concejalías competentes, dada la transversalidad de la materia, ha emprendido a lo largo de los años para mejorar la movilidad urbana sostenible y fomentar los medios de transporte no contaminantes". Así, en la definición de la propuesta, se habría tomado como referentes el Plan de Movilidad Urbana Sostenible de la ciudad de Alicante (PMUS), el Plan de Infraestructuras Ciclistas de Alicante (PICA) del año 2011, el proceso de Peatonalización del Centro Tradicional, el Plan de Accesibilidad de la ciudad de Alicante, en el medio urbano, itinerarios peatonales accesibles, actualmente en fase de aprobación definitiva, junto con el Plan de Accesibilidad de las fiestas oficiales de nuestra ciudad, el Plan de Inversiones para la mejora del servicio público de transporte urbano colectivo de viajeros, en autobús, 2017-2019 y el Proyecto de Servicio Público de transporte urbano colectivo de viajeros en autobús (PSP) para avanzar en flotas más eficientes y menos contaminantes, control de la calidad del aire, Mapa del Ruido y Plan Acústico Municipal, entre otros planes y medidas tendentes a la promoción del uso de la bicicleta y los modos de transporte colectivos, entre otros.
La propuesta ha suscitado las esperables reacciones por parte de los grupos de la oposición. Al menos, las que conforman el eje progresista. Así, en primer término, el portavoz municipal del PSOE, Paco Sanguino, ha valorado el acuerdo para asegurar que "nos alegramos de que el bipartito anuncie unas inversiones en ZBE cuando esta misma mañana hacíamos un llamado para que el Ayuntamiento instale puntos de medición de calidad del aire por los datos negativos que se han publicado hoy mismo. Como siempre, llegan tarde y lo solucionan hablando de inversiones millonarias que o no se ejecutan, o se rebajan o directamente no se hacen y acuden a fondos que son de otras administraciones para engordar sus raquíticas cifras de inversión en personas y ciudad".
También se ha pronunciado al respecto el grupo municipal de Compromís. Portavoces de la coalición han asegurado que "saludamos positivamente esta iniciativa que venimos reivindicando hace meses". "Esperamos que sea un punto de inflexión y sitúe la política municipal en la agenda de la transición ecológica con la adopción de medidas encaminadas a conseguir la neutralidad climática en 2030. Un objetivo todavía muy lejano, dado que estamos con unos niveles muy preocupantes respecto a la calidad del aire de la ciudad, que ha empeorado mucho en el último año", según las mismas fuentes.
"Desde Compromís queremos conocer el proyecto, saber cómo se va a financiar, sus plazos e instamos al bipartito de derechas a no limitarse a cumplir la ley y que no lleguen multas, sino a tener un Plan integral de Resiliencia frente a la crisis climática que de forma integral, tal y como planteó Compromís en la declaración que se aprobó en el pleno de septiembre de 2019, y se atiendan a los retos de la emergencia climática para transformar la ciudad desde la sostenibilidad ambiental", añade el comunicado. "Debemos cumplir con los objetivos del Pacto Verde en el que está integrada Alacant a propuesta de Compromís y para ello necesitamos una apuesta política firme y decidida que, de momento, no ha mostrado Barcala y su gobierno de derechas", concluye.
Por último, Unidas Podemos-EUPV ha mostrado su desconfianza respecto a "la voluntad política del gobierno de Barcala para llevar a cabo la necesaria transformación de la movilidad en nuestra ciudad, especialmente por los pocos avances que se han producido en la materia en esta legislatura". Así, la coalición ha instado a que se desarrollen las mejoras incorporadas en esa propuesta de planificación en el menor tiempo posible.
Su portavoz municipal, Xavier López, ha considerado "buena noticia que, en lugar de dedicarse a hacer oposición también al Gobierno central, en esta ocasión, se aprovechen los mecanismos de financiación para la transformación urbana que pone a disposición el gobierno". Con todo, ha matizado que "si tenemos que evaluar los cambios en movilidad realizados en esta legislatura, desde luego es un contundente suspenso, porque no se han impulsado al ritmo que tocaba ni las peatonalizaciones, ni desde luego se ha impulsado los carriles bicis, y además se ha presentado un proyecto totalmente continuista para la concesión del transporte público".
En esta línea, ha advertido de que "los fondos deben ser empleados para el fin que se solicitan y espero que se acelere el lento ritmo de transformación de la ciudad, que es urgente y una necesidad ambiental y de salud pública". López ha señalado que "estaremos vigilantes porque la costumbre de Barcala es hacer anuncios millonarios que luego, si es que se llegan a ejecutar, que es algo que les cuesta más que hacer los anuncios, son proyectos con menores prestaciones que las anunciadas y con menor inversión". Así, ha asegurado que "apretaremos para que se ejecuten estas transformaciones en tiempo y forma, y no se atasquen como viene siendo habitual en cualquier proyecto impulsado por Barcala".