ALICANTE. El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Alicante, el bipartito en situación de minoría compuesto por Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs), negocia in extremis para mantener la prestación del servicio de limpieza de colegios y dependencias municipales ante el fin del contrato en vigor, en manos de la alianza empresarial compuesta por Clece (filial de ACS) y Fissa, bajo la denominación de UTE Limpal.
La concesión, adjudicada por un plazo de dos años, vence el próximo 8 de febrero sin que la UTE que la asume haya ejercido su derecho a solicitar la prórroga de un año de duración, que se contemplaba en el pliego de condiciones. Y, también, sin que se haya convocado todavía el nuevo proceso de licitación que resulta necesario para regularizar su prestación.
Así, PP y Cs habría entablado ya conversaciones con la gerencia de UTE Limpal para concertar la continuidad de la prestación en precario -ya sin la cobertura legal de un contrato- durante el tiempo en el que se demore la convocatoria del nuevo concurso con el fin de que no se interrumpa la limpieza en los 62 centros educativos de la ciudad para garantizar el mantenimiento de las condiciones de higiene requeridas.
En principio, según las fuentes consultadas, UTE Limpal habría mostrado su predisposición a continuar desarrollando la labor de manera provisional, sin quedar sujeto por contrato a su prestación por otro año más, como hubiese sucedido en el caso de haber demandado la prórroga. Eso sí, esa predisposición a mantener la tarea quedaría a la espera de que se concrete la programación y las condiciones económicas por las que se regiría la prestación durante ese plazo extra.
Salvo cambio de criterio improbable, la pretensión del bipartito sería que se mantenga el servicio con las mismas premisas de periodicidad y precio con las que se viene operando hasta ahora. En todo caso, el portavoz adjunto del equipo de Gobierno y edil de Contratación, Manuel Villar (PP), apuntó este martes -durante su comparecencia posterior para informar sobre los asuntos tratados en Junta de Gobierno- que el servicio no se iba a dejar de prestar en ningún caso.
De hecho, según fuentes consultadas por este diario, en el supuesto de que UTE Limpial desistiese de asumir la prestación de manera temporal, el bipartito trabaja con la hipótesis de impulsar un proceso de contratación de emergencia para garantizar la continuidad de la limpieza en los centros escolares mientras se produce la adjudicación del servicio definitivo, como ya sucedió durante la etapa de gobierno del extinto tripartito (PSOE, Guanyar y Compromís) a principios de 2017, cuando se produjo la renuncia de Ortiz e Hijos a seguir ejerciendo esa labor.
Villar también confirmó este martes que el equipo de Gobierno está trabajando en la convocatoria del nuevo concurso para normalizar el servicio. Como informó Alicante Plaza, en este nuevo proceso se prevé extender la duración del contrato por un plazo de cuatro años. Como también ha informado este diario, se da la circunstancia de que los seis grupos políticos representados en la corporación se encuentran inmersos en la tarea de fiscalización sobre el cumplimiento del contrato de limpieza actual en la comisión específica creada a instancias del PSPV-PSOE. El edil de Contratación también añadió este martes que podría citarse a los responsables de la gerencia de UTE Limpal para que ofrezcan explicaciones ante la comisión, en el caso de que se considere necesario tras las comparecencias del jefe del servicio de Infraestructuras, Javier Maestre, y de los inspectores municipales a cargo de la supervisión de su prestación, previstas para este viernes.