ALICANTE. Marcha atrás (por ahora) en la resolución de la concesión del quiosco municipal que alberga la histórica heladería 'Peret'. El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Alicante, del Partido Popular (PP), ha acordado este martes, en Junta Local, la estimación parcial de un recurso de reposición presentado por la sociedad que explota el quiosco frente al acuerdo de rescisión del contrato de explotación, aprobado el pasado 5 de marzo, con el propósito de promover la adopción de esa misma decisión siguiendo los pasos administrativos requeridos tras la presentación de ese recurso.
De este modo, el departamento de Contratación retrotrae el procedimiento y deja sin efecto la resolución del contrato para solicitar el dictamen que resulta preceptivo al Consell Jurídic Consultiu (CJC) de la Generalitat respecto a los argumentos expuestos en el recurso presentado por Kiosco Peret: la sociedad gestora de la instalación desde la última renovación del contrato, en 2015, ahora ya desvinculada de la familia Fuster (la impulsora de la icónica heladería del Paseo de La Explanada hace más de un siglo).
Eso sí, la retroacción de acciones solo pretende aportar todas las garantías administrativas necesarias para que pueda formalizarse la ruptura del contrato de concesión sin incurrir en causa de nulidad posterior, ya que la posición municipal no ha variado respecto a la concurrencia de incumplimientos que justifican la rescisión del contrato por motivos imputables al concesionario. En concreto, el retraso en el pago del canon de explotación, así como la deuda contraída por el impago de la tasa de basura y de la tasa de veladores.
En su conjunto, la suma adeudada por Kiosco Peret superaría los 131.000 euros hasta septiembre de 2023. De ahí que se iniciase el procedimiento de resolución de la concesión y que se retirase la autorización para instalar su velador en el espacio de terraza habilitado en el entorno del quiosco, en el extremo norte de La Explanada, como informó este diario.
¿Cuál es la consecuencia inmediata del acuerdo adoptado ahora? Básicamente, el retraso en la posible reapertura del quiosco. El equipo de gobierno pretendía promover la convocatoria de un nuevo concurso para renovar su explotación con un nuevo concesionario de modo que pudiese reactivarse esta misma campaña estival.
De hecho, ya se había constatado el interés de una decena de empresas o particulares interesados en optar a esa futura licitación en el momento en el que se cerrase el expediente de rescisión de la concesión. E incluso se había preparado ya la notificación del plazo de diez días para que Kiosco Peret concluyese el vaciado y desalojo del material e instalaciones propias que todavía pudiesen encontrarse en el interior del edificio.
No obstante, esos pasos quedan ahora suspendidos a la espera de que el CJC pueda avalar la rescisión del contrato de explotación, tras el hipotético descarte del recurso de reposición de la concesionaria, cuando queda un año de duración de ese contrato, al margen de una posible prórroga por otros cuatro años adicionales.
¿En qué argumentos se sustancia el recurso de reposición presentado por la gestora del quiosco? Kiosco Peret viene a alegar en esa impugnación, registrada el 18 de marzo, que el Ayuntamiento no habría tenido en cuenta los escritos previos presentados el 9 de febrero en los que entiende que sí habría facilitado documentación acreditativa sobre el acuerdo alcanzado con Suma por el que se admitiría su solicitud de pago fraccionado de las deudas contraídas con el Ayuntamiento.
En esa documentación, también se incluiría la propuesta de constitución de una hipoteca sobre una finca que quedaría como garantía para cubrir los impagos pendientes. Es decir, los requisitos exigidos por el departamento de Ocupación de Vía Pública (responsable de las concesiones de instalaciones municipales) para admitir el plan de pago a plazos planteado por la propia empresa con el fin de cumplir con sus compromisos con la administración local.
No obstante, los técnicos del departamento de Tesorería, de Ocupación de Vía Pública y de Contratación consideran que esos escritos se presentaron fuera del plazo facilitado para ello y que, además, tampoco satisfarían las condiciones exigidas para que pudiese tenerse en cuenta esa propuesta de pago a plazos. De ahí que persista en mantener que la concesionaria ha incurrido en un incumplimiento contractual y se persista en la intención de acordar la resolución del contrato de explotación, en el momento en el que se pronuncie el CJC.