Los vehículos grúa estacionados en uno de los depósitos municipales de Alicante.ALICANTE. Nuevo contrato con nuevas prestaciones, también en lo que respecta a la dotación de instalaciones. El Ayuntamiento de Alicante prepara el terreno para licitar la gestión del servicio de estacionamiento regulado -conocida como el sistema ORA o de la zona azul- con el diseño de una de las infraestructuras que quedarán incorporadas en la nueva prestación: un depósito de vehículos único para los arrastres, llamado a sustituir a los dos recintos actuales, situados en el Bacarot y en el polígono de Babel.
Esas instalaciones quedarán ubicadas en una parcela de titularidad municipal de suelo urbano de más de 30.000 metros cuadrados situada en el barrio de Rabasa, junto a la avenida Jaime I (prolongación de la Vía Parque) en el margen Norte del PAU 2. De esa parcela, situada junto al emplazamiento previsto para la construcción de la futura Comandancia de la Guardia Civil (cuyas obras de urbanización previas siguen pendientes de volver a licitarse), se reservan unos 9.400 metros para encajar el nuevo recinto, en el que se centralizarán los servicios públicos de retirada, inmovilización y depósito de vehículos y de estacionamiento regulado en superficie.
El estudio de viabilidad sobre la construcción de esas nuevas dependencias, ahora en exposición al público tras su aprobación en Junta de Gobierno, estima que su coste de construcción requerirá de un desembolso de más de 15,2 millones (sin impuestos) que quedaría a cargo de la empresa que asuma la explotación del sistema ORA tras la convocatoria de su correspondiente licitación, en la que se pretende ampliar las zonas sujetas a estacionamiento con control horario.
Hasta ahora, la gestión de ese sistema sigue en manos de la UTE compuesta por Vectalia y Pavapark después de que se ampliase su plazo de gestión hasta el próximo 25 de enero como fórmula de compensación para restablecer el equilibrio económico del contrato al cierre de su duración definitiva, una vez concedidas todas las prórrogas ordinarias contempladas en el pliego.
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Ese nuevo depósito tendrá capacidad para acoger 561 vehículos: una cifra menor de la disponible hasta ahora. En concreto, el depósito de Babel cuenta con una superficie aproximada de 5.000 metros cuadrados y una capacidad de 150 plazas, mientras que el depósito de Bacarot dispone de cerca de 35.000 metros cuadrados y 1.400 plazas. No obstante, el estudio de viabilidad sobre las nuevas instalaciones considera que las 561 plazas serían suficientes para cubrir las necesidades del servicio y que, en todo caso, podría recurrirse a alguna de las otras dos dependencias en el supuesto de que resultase imprescindible.
Además, el estudio concreta que se habría optado por construir el nuevo recinto en base a dos argumentos esenciales. El primero, poder disponer de un recinto público propio, ya que el depósito de Bacarot es de titularidad privada y su uso conlleva el pago de un arrendamiento. Y el segundo, contar con unas instalaciones situadas en un emplazamiento de fácil acceso en transporte público para que la ciudadanía pueda desplazarse a retirar su vehículo en el caso de que haya sido remolcado por la comisión de una infracción que conlleve arrastre.
A ello se sumaría, además, un tercer factor: la disposición de una ubicación que permita acortar los tiempos de recorrido para los vehículos grúa desde cualquier punto del conjunto del término municipal. Una ventaja que se conseguiría al tratarse de un emplazamiento situado en un eje viario transversal como la Vía Parque.
