ALICANTE. No es que haya 'muchas' derrotas 'bonitas' precisamente, pero la encajada por el Elche el sábado fue 'fea' donde las haya y exige no pocas reflexiones a los protagonistas.
Los franjiverdes salieron goleados de su visita a un conjunto que tiene como objetivo la permanencia en LaLiga Hypermotion, tras hacer no pocas concesiones en su área: el penalti por manos evitables de Diego González que propició que el Burgos se adelantara en el marcador, la mala decisión del meta Edgar Badía en el disparo que precedió al segundo tanto del contrario... son solo algunas de las manchas en la actuación del equipo de Sebastián Beccacece, que se refirió a las mismas como "regalos" y cuya (loable) idea de fútbol se dio de bruces con la realidad de la categoría. Los suyos monopolizaron la posesión en el primer tiempo, pero a diferencia de su rival no aprovecharon ninguna de las contadas ocasiones que hubo en ambas áreas y se fueron al descanso ya con una desventaja de dos goles a cero. Tras el mismo se repitió el guion... y pudo ser peor de haber contado con más puntería un adversario cuyo entrenador Jon Pérez Bolo conoce bien LaLiga Hypermotion (incluso como futbolista) y decidió encarar el choque con un planteamiento tan sencillo como habitual en la misma: defensa de cuatro hombres y un centro del campo más o menos poblado en detrimento o en favor del ataque, pero estar ordenados atrás, cerrar vías de penetración al rival cuando el balón era suyo, darle velocidad a la circulación del mismo cuando lo recuperaban y cuidar las acciones a balón parado en ambas áreas. Es verdad que la efectividad también le acompañó (convirtió cuatro de sus cinco ocasiones de gol) y eso fuera de la elite es aún más importante que en ella, pero el Burgos, con una plantilla sobre el papel inferior a la del Elche, cierra la jornada séptima con diez puntos por los ocho de los franjiverdes, quienes tienen la zona de descenso a Primera Federación a solo uno.
Los de Beccacece se plantaron en El Plantío habiendo sumado ocho de los últimos doce puntos puestos en juego, con el objetivo de reafirmar no solo su mejoría y dejar claro que como recién descendido su meta es el regreso por la vía rápida a LaLiga EA Sports. Sin embargo, encajaron su tercera derrota en siete jornadas y la segunda ante un rival que no aspira precisamente a lo anterior (en la jornada inaugural un recién ascendido como el Racing de Ferrol les endosó la primera y, para más inri, en el Martínez Valero).
El gusto del técnico rosarino por poner a futbolistas fuera de la posición en la que se desenvuelven de forma natural (el sábado, teniendo a Sergio Carreira y Josan en el banquillo, el central Álex Martín fue el lateral derecho en el primer tiempo, pero es que hasta hace dos jornadas un lateral derecho como Mario Gaspar jugaba de central y, por momentos, se sumaba a la nómina de mediocentros, algo que ante el Leganés también había hecho Martín) y por apuestas tácticas alejadas del 1-4-4-2 o el 1-4-2-3-1 que tanto se estila en la categoría no siempre suma, pero es verdad que este fin de semana no fue él precisamente el que salió en la foto para mal. Es más, Beccacece le dio la oportunidad a Diego González de ser titular por primera vez desde su llegada al club, tras su buen desempeño en la jornada anterior, pese a que en ese momento era aún la última rotación para él en el eje de la zaga. El problema es que en el fútbol la cuerda se rompe por el lado más débil, el del entrenador, y aunque es verdad que como Jorge Almirón, tanto en su primera etapa como en la segunda en la entidad, Beccacece va a tener más oportunidades que las que tendría otro técnico (para eso le 'representa' Christian Bragarnik)... la realidad de los resultados y por extensión de la clasificación van a pesar más tratándose del segundo escalón del fútbol español, donde el Elche tiene la presunta condición de cabeza de ratón y no de cola de león como en LaLiga EA Sports.
El equipo franjiverde ha de recibir el próximo sábado (18:30 horas) al Levante; medirse el miércoles siguiente (21:30 horas) al Sporting en El Molinón; jugar el lunes 9 de octubre (19 horas) en el Martínez Valero con el Andorra; y girar visita al Nuevo Pepico Amat el 15 de octubre (16:15 horas) para verse las caras en un derbi provincial con el Eldense.