Foto: RAFA MOLINAALICANTE (EFE). El icónico paseo de la Explanada de Alicante inspira la nueva imagen corporativa de Aguas de Alicante, la empresa mixta de servicios del agua más antigua del mundo que con motivo de la celebración de su 125 aniversario se plantea nuevos y ambiciosos retos, como la próxima constitución del vanguardista Centro de Inteligencia del Agua.
El presidente de Agbar y vicepresidente de Iberia y Latinoamérica de Veolia, Angel Simón, ha participado junto al alcalde, Luis Barcala, al presidente de la Diputación, Carlos Mazón, y el director general de Aguas de Alicante, Javier Díez, en la presentación al público, tanto presencial como online vía streaming y en metaverso, de la nueva imagen de la compañía.
El nuevo 'logo' son tres olas blancas sobre un fondo azul que hablan de los ejes de la compañía como son la eficiencia en el uso del agua, el cuidado de las personas y la preocupación por el medio ambiente, y llevan una ondulación "alicantinizada" porque recuerda a la turística Explanada, ha relatado el director creativo del grupo Idex, Ángel González.
El presidente de Abgar ha destacado que el futuro Centro de Inteligencia del Agua será un instrumento útil para luchar contra la crisis climática dado que ayudará al planeamiento de cada fase del ciclo del agua de forma innovadora y sacando rédito de la experiencia acumulada durante décadas.
El cambio climático y los retos de la sostenibilidad, principalmente la reutilización de las aguas, serán dos de los aspectos que centren la actividad del Centro, del que ha recordado que se nutrirá del 'know-how' de Aguas de Alicante, una de las compañías con una mayor tasa de reutilización de caudales y cuyo reto es llegar al cien por cien.
Del mismo modo, Simón ha destacado la sintonía con el otro socio de Aguas de Alicante, el ayuntamiento de la capital, en la consecución de los grandes objetivos de actuación y para situar a la empresa mixta como referente en la innovación de todos sus campos, tanto desde el punto de vista técnico como digital.
Según el alcalde de Alicante, Luis Barcala, el proyecto del Centro de Inteligencia del Agua nació hace 3 años y prevé que sea licitado "en breve" para tener su sede en la planta baja del antiguo parque de bomberos, en la céntrica plaza de Séneca.
Se trata de una sede "emblemática" en la ciudad para "un centro puntero de Inteligencia Artificial aplicada a la gestión del agua" que estará acompañado en el primer piso (el antiguo gimnasio de los bomberos) de un uso dentro de la estrategia Alicante Futura, de manera que el alcalde espera que se convierta en un "gimnasio de ideas".
Ha confiado en que este Centro "revolucione la gestión del agua" y ayude al reto principal que es "que no se escape una gota de agua" dentro de una gestión "circular", donde ya se han dado pasos vanguardistas muy ambiciosos como el parque-marjal de la Playa de San Juan, "que excepcionalmente se convierte en una infraestructura hidráulica que salva de inundaciones".
También lo son los depósitos antirriadas, que ayudan a reutilizar un agua que, en caso contrario, acabaría en el mar para destinarla a unos necesitados riegos agrícolas y baldeos en las calles. El alcalde también se ha referido a otro de los ejes de Aguas de Alicante como es el fondo social que ha impulsado la empresa para "ir más allá del tratamiento del agua" y favorecer "que nadie se pueda quedar privado" de este un recurso "imprescindible para todos".
En un acto desarrollado en la sala Ágora del Auditorio de la Diputación (ADDA), el presidente de la institución provincial, Carlos Mazón, ha alabado la implicación de Aguas de Alicante con el territorio alicantino, en sus palabras con "el terruño", y ha destacado la gestión "eficiente, adecuada, responsable y sostenible" que hace de un bien tan valioso como escaso mientras que el director general de Aguas, Javier Díez, que dirige una plantilla de 322 personas, ha fijado los retos de la compañía en la solidaridad con las personas, el cuidado del medio ambiente y la eficiencia con un recurso "muy escaso".
Los comienzos de Aguas de Alicante se sitúan en 1898 con el Canal del Cid para la traída de aguas desde la comarca del Vinalopó a la sedienta ciudad de Alicante, pero fue en 1953 cuando se constituyó la empresa mixta para convertirse, al día de hoy, en la más antigua del mundo en servicio de estas características.
