ALICANTE. El grupo hotelero de origen madrileño DormirDCine ultima su aterrizaje en Alicante con la apertura del establecimiento que se convertirá en el próximo cuatro estrellas de la ciudad, tras acometer una remodelación integral del antiguo Hotel Gravina 5. Salvo contratiempo de última hora, el nuevo hotel abrirá al público a finales del mes de julio (previsiblemente, el día 20) después de haber tenido que superar varias dificultades en las obras de ampliación sobre el edificio situado justo a espaldas del hotel original, con fachada en la calle San Telmo.
La conexión con esa finca permitirá que el establecimiento acabe ofreciendo más del doble de las habitaciones de las que disponía el Gravina. Así, pasará de 22 a 57 estancias. Y, además, cada una de ellas, estará provista de un interiorismo particular, con una tematización inspirada en el mundo del cine, en sintonía con el Hotel DormirDCine de Madrid, situado en el barrio de Salamanca. De hecho, como sucedió en ese establecimiento matriz del grupo, también se convocó una suerte de concurso público para que cualquier interesado pudiese presentar sus propuestas de ambientación cinematográfica para las habitaciones.
En principio, el grupo prevé que los trabajos pendientes (fundamentalmente, en el acceso y la zona de recepción) puedan quedar concluidos en el margen de dos semanas, con lo que se contaría con un plazo de un mes para completar el equipamiento del conjunto de las instalaciones.
Con ese calendario, el nuevo establecimiento podrá explotar al menos parte del verano (los meses de agosto y de septiembre) pese a que inicialmente se había sopesado la posibilidad de que pudiese acoger a los primeros clientes desde el pasado mes de marzo.
Por lo pronto, ya se dispone del personal necesario para su puesta en marcha, puesto que se mantiene el mismo equipo profesional a cargo del Hotel Gravina.
Al margen de la singularidad de las estancias, entre los puntos fuertes del establecimiento figura también la apertura de una terraza chill out con servicio de bar en su séptima planta desde la que se puede contemplar el mar y la playa de El Postiguet, además de las vistas del barrio de Santa Cruz.