ALICANTE. El HLA Alicante asestó a Basket Navarra un golpe de los que duelen. El equipo alicantino sumó el 2-0 en la eliminatoria, desarboló a su rival (87-68) y lo dejó herido de gravedad para el tercer encuentro que se disputará en Pamplona el próximo viernes 4 de mayo (20.30 horas). La formación alicantina está a una sola victoria de acceder a semifinales tras un choque casi perfecto por parte de los hombres que dirige David Varela. En ataque, un 48,6 por ciento en triples (18 anotados), un 57,1 por ciento en tiros de dos y 112 de valoración (por 77 de los pamplonicas) rompió los esquemas de David Mangas, quien tras el partido, llegó a decir que su equipo fue “una comparsa”. En el conjunto lucentino destacaron Adrián Chapela (MVP del partido) con 17 puntos, siete asistencias y 26 de valoración, Álvaro Lobo con 17 puntos, tres asistencias y 22 de valoración; y el máximo anotador del encuentro, Nacho Díaz, con 19 puntos y cuatro rebotes con 20 de valoración.
El encuentro comenzó con dos triples consecutivos de los locales anotados por Lobo y Rivero, si bien encontró una respuesta en forma de parcial (0-7) de su rival (6-7, m.5). Volvió a tener un arreón desde el 6,75 el quinteto alicantino para marcharse 14-9 y se volvió a topar con la reacción visitante con otro parcial de 0-5 (14-14, m.9) gracias a la entrada en pista de Lamine Dieng, poderoso bajo aros en ese primer acto. A pesar de ello, el Lucentum cerró la apertura de partido tres arriba (19-16).
El segundo cuarto fue el mejor que ha disputado la franquicia del Pedro Ferrándiz esta temporada. Salía todo en ataque y cortocircuitó en defensa a su oponente, que no encontró soluciones a la defensa 3-2 planteada por David Varela. Tres triples seguidos (dos de Nacho Díaz y uno de Pedro Rivero) comenzaron a allanar el camino para los de Alicante (33-18, m.13). A medida que transcurrían los minutos iba creciendo la ventaja. Una canasta de Adrián Chapela sobre la bocina dejó el 50-26 con el que ambos equipos se marcharon a vestuarios y con el público levantado de sus butacas y ovacionando a los suyos.
Todavía con el buen gusto que dejó el plantel alicantino en la primera parte, la parroquia local siguió disfrutando del buen juego de su equipo, que continuó acribillando a su oponente desde la línea del 6,75. Nacho Díaz y Álvaro Lobo ampliaron sus estadísticas (56-30, m.25), mientras que en los navarros, tan sólo Adrián García (apagado en los dos primeros cuartos) y Davis capearon el temporal anotando para que la diferencia no creciera, pero creció. A la conclusión del tercer periodo, HLA Alicante vencía por 27 puntos (71-44).
Ni los tiempos muertos, ni la arenga de Mangas a los suyos antes de arrancar el último parcial hizo que los pamplonicas reaccionaran. Todo lo contrario. El vendaval ofensivo del Lucentum no tuvo fin y llegó a tener 32 puntos de diferencia (76-44, m.32) ante el delirio de la grada del Centro de Tecnificación. Ahí no acabaría la sangría, puesto que un triple de Tomás Fernández a falta de 4’16’’ para concluir el partido colocó a los de casa 38 puntos arriba (84-46). Increíble de creer en una eliminatoria de play-off, pero así fue. A partir de ahí, Navarra se dedicó a maquillar el marcador, Varela reservó a sus jugadores importantes y puso sobre el parqué a los canteranos Jaime Llanos y Pablo Matarredona. Con ellos en pista y con Lafuente jugando como base finalizó el partido y el segundo punto de la serie se quedó en Alicante. Seguro que el tercer partido será diferente, pero el conjunto lucentino está a tan solo un paso de seguir soñando en Oro.
Ficha técnica:
87 - HLA Alicante (19+31+21+16): Lobo (17), Outerbrdge (5), Rivero (12), Sidibe (4) y Lafuente (1) –cinco inicial- Llano (0), Fernández (5), Chapela (17), Kingsley (5), Díaz (19), Matarredona (0) y Grossenbacher (2).
68 - Basket Navarra (16+10+18+24): Davis (14), Moussa (8), Cruz (11), Yarnoz (3) y García (9) –cinco inicial- Calvo (8), Lacunza (0), Nikolic (7) y Dieng (8).
Árbitros: Morales Ruiz y Peláez Santana. Eliminaron por cinco faltas al visitante Calvo (m. 38).
Incidencias: Segundo partido de la primera eliminatoria del play-off de ascenso a LEB Oro disputado en el pabellón Pedro Ferrándiz ante dos mil espectadores.