El presidente de Les Corts, Enric Morera, haciendo uso del mazo en una sesión. Foto: INMA CABALLER/CORTSVALÈNCIA. La Presidencia de Les Corts es una de las posiciones más privilegiadas de las que se juegan en las próximas elecciones autonómicas del 28 de abril. La segunda autoridad de la Comunitat Valenciana está ocupada actualmente por Enric Morera, histórico dirigente del Bloc, quien fue elegido por Compromís para desempeñar esta tarea tras el Pacto del Botánico. Pero, ¿quién ocupará este puesto en los próximos cuatro años?
Las distintas formaciones políticas que toman parte en los comicios tratan de rehuir la respuesta a esta cuestión. Uno de los motivos es evidente. Que un partido reconozca que tiene un favorito o favorita para el puesto indica que no confía en obtener el premio 'gordo' de los comicios: la Presidencia de la Generalitat. Es decir, todas las fuerzas en liza son conscientes de que se necesitarán acuerdos entre varios partidos para lograr una mayoría por lo que la Presidencia de Les Corts se convertirá, probablemente, en el premio de consolación para un partido que no haya logrado su objetivo principal, tal y como ocurrió con Compromís en 2015.
Ahora bien, atendiendo a las candidaturas que los distintos partidos han presentado a Les Corts Valencianes, no puede decirse que abunden los perfiles idóneos para un cargo de esta categoría. Más que nada porque este puesto suele ir destinado a dirigentes con amplia experiencia parlamentaria o con una trayectoria dilatada en política. Eso no quiere decir que no pueda escogerse a un debutante o a una persona joven, pero tradicionalmente esta no ha sido la vía elegida para designar al máximo responsable de la cámara.
Así, cuando se presentó a las primarias para la lista de Compromís, Morera incidió en su deseo de dedicarse a la gestión, lo que transmitía un deseo evidente de situarse al frente de una conselleria. Una pretensión que causó cierto malestar en ciertos sectores dirigentes de la formación nacionalista, que consideraron inoportunas unas manifestaciones de esas características cuando ni siquiera se habían celebrado las primarias para elegir a los candidatos. Sobre esto, desde el entorno de la cúpula del Bloc no se muestran excesivamente favorables a que el presidente de Les Corts se salga con la suya y consiga un área de gobierno, si bien admiten que su resultado en primarias fue notable (el más votado para el cuerpo de lista).
Con estos mimbres, algunos empiezan a ver que, si el Botànic se reedita pero Compromís no supera al PSPV, Morera podría repetir en el puesto aunque el grupo parlamentario no se haya mostrado especialmente satisfecho con su gestión. Y es que en la lista de la coalición, tampoco se vislumbra un favorito alternativo para sustituirle y quizá el nombre con más caché para ello es el del conseller de Economía, Rafa Climent, quien tampoco es que goce de demasiados aliados en la dirección del Bloc para ello.
En esta línea, si a Compromís cuesta arrancarle las posibilidades que manejarían en esta situación, algo similar ocurre con el resto de formaciones políticas. En 2015, el PSPV optó por situar a Francesc Colomer en el cargo de forma temporal hasta que su compañero Ximo Puig fue investido presidente de la Generalitat, en un mandato que apenas duró tres semanas para después ser sustituido por el citado Morera.
Si se repitiera una operación de estas características -o si el Botànic se reeditara pero con el PSPV como segunda fuerza-, algunos nombres que suenan para presidir la cámara en la bancada socialista son los de Carmen Martínez -vicepresidenta de Les Corts en esta legislatura- o los de los consellers Vicent Soler y Ana Barceló.
Respecto a la tercera pata del Botànic, Podemos, ha realizado una renovación tan amplia en su grupo parlamentario que se antoja complicado vislumbrar posibles candidatos a un puesto de estas características si se convirtieran en segunda fuerza política del bloque de izquierdas. Sobre esto, la cabeza de lista por Castellón, Irene Gómez, tiene la ventaja de haber formado parte de la Mesa de Les Corts en esta legislatura.
En cuanto a si el bloque de derechas obtuviera la mayoría, los sondeos apuntan a que la segunda fuerza sería Ciudadanos y, por tanto, posiblemente la Presidencia de Les Corts recaería en la formación naranja. Pocos son los que se atreven a dar nombres en un grupo parlamentario con muchas caras nuevas, si bien algunos apuntan a la portavoz municipal de Alicante y número dos de la lista por esa circunscripción, Yaneth Giraldo, como posible opción.
Es sabido que la canícula veraniega recalienta las meninges a más de uno. Lo tórrido de la estación no disculpa a los políticos. Más de un ciudadano se pregunta para qué va a las urnas si luego sus representantes no se ponen de acuerdo para gobernar. Y ya no vale que estemos en tiempo de tanteo y de juegos más o menos florentinos. Aún no lo hemos visto todo
