ORIHUELA (EFE). El juzgado de Instrucción número 3 de Orihuela ha citado a declarar como investigado al ex concejal de Seguridad Ciudadana de Benejúzar Vicente Cases, del PP, por la "extraña" adquisición y desaparición durante meses de una pistola 'táser', valorada en 4.075 euros.
Así lo ha confirmado el concejal a Efe, quien tiene la "conciencia muy tranquila y muchas ganas de demostrar" su "total inocencia" en sede judicial, donde espera "aclarar y zanjar un asunto que no tiene otro objetivo que el desgaste político".
La investigación al concejal, ahora en la oposición, se ha abierto tras la denuncia presentada por el ayuntamiento de Benejúzar, gobernado por una coalición de PSPV-PSOE y Ciudadanos, donde se pedía investigar las supuestas irregularidades detectadas en la adquisición de una pistola táser ordenada por Cases en el anterior mandato.
El alcalde, el socialista Miguel López, explicó en su momento que este arma fue enviada al ayuntamiento en marzo de 2019, cuando gobernaba el PP, según le informó la empresa vendedora, que dice disponer de un certificado y albarán firmados por el entonces responsable de Seguridad Ciudadana, el popular Vicente Cases.
No obstante y según sus palabras, este arma "nunca llegó a aparecer ni a ser utilizada", tal y como "corroboró la propia Policía Local", aunque a finales de junio la mercantil reclamó al ayuntamiento el importe: 4.075 euros.
En ese momento se trató de averiguar dónde se encuentra esta pistola 'táser' que "no aparecía por ningún sitio" y, poco después, en agosto, un desconocido la envió a la empresa suministradora por correo, una devolución que rechazó la mercantil al estar "fuerza de plazo", por lo que seguía pidiendo el dinero al ayuntamiento.
"Lamento que se instrumentalice la administración de justicia para ataques políticos sin mucho contenido", ha expuesto Cases en el citado comunicado, donde pone de manifiesto que así podrá declarar "con todas las garantías procesales". El popular ha explicado que esta pistola la devolvió a la empresa "por recomendación de la Secretaría General del ayuntamiento".
"Y así procedí dentro del más estricto cumplimiento del deber tras la conversación con la secretario y el entonces jefe de la Policía Local, como así consta en la diligencia que obra en mi poder", ha indicado.
"La defensa eléctrica", ha continuado, "no estuvo desaparecida ni en mi casa, y en ningún momento el nuevo concejal de Seguridad -Simón Marín- se puso en contacto conmigo". Pese a todo esto, el ayuntamiento terminó por pagar esta pistola 'táser' para evitar un contencioso, "dado que la empresa había prestado el servicio de forma efectiva", y ya está en poder de la Policía Local.