ALICANTE. El pleno de la Diputación de Alicante ha vuelto a demostrar que la institución es un muro infranqueable, y que pese a que el PP está en minoría, nadie es capaz de superar la barrera izquierda o derecha. No se pacta nada. O se pacta sobre seguro. El principal instrumento de ayudas para los municipios, ya sean grandes o pequeños, el Fondo de Cooperación Municipal, impulsado por la Generalitat con la participación de las diputaciones, ha vuelto a encallar. Sobre todo, por falta de voluntad: nadie quiere darse la mano con el enemigo. El PP, satisfecho con el voto del diputado tránsfuga, que ha vuelto a ser decisivo para aprobar las cuentes, se ha encontrado con un fallo del PSOE -presentar una enmienda incompleta- para tener un argumento con base para no hacer un gesto y, por tanto, para no respaldar la inclusión del fondo con obras no condicionadas.
Lo habían intentado los socialistas y Compromís, con apelaciones directas al presidente César Sánchez: sólo le pedían un gesto, incluir una partida en el pesupuesto, por mínima que fuera, para recoger el Fondo de Cooperación, al menos, un 30% de los 13,7 millones de euros que le corresponde aportar a la institución provincial. Pero no: hubo portazo de nuevo, como ya ocurriera en diciembre de 2016.
El PP defiende que cada uno tiene su criterio para hacer la aportación al Fondo de Cooperación, y que ese criterio es hacerlo con los remanentes de tesorería; es decir, con las sobras del presupuesto del 2017 y en obras condicionadas dentro del catálogo de las financieramente sostenibles. El PSPV estaba dispuesto a la abstención en la votación de los presupuestos, si hubiera existido ese gesto, y Compromís le hubiera correspondido. Pero no, no llegó y todo se volvió a repetir, como en 2016. Lo demás ya fue lo de siempre, reproches políticos.
Por ejemplo, Compromís, que sí había presentado una enmienda para corregir el presupuesto, con altas y bajas en las cuentas -algo que el PSOE no había hecho, y de ahí las críticas de los populares- también recibió contraréplica por haber priorizado el fondo de cooperación en su texto en detrimento de las partidas de las carreteras y las obras hidráulicas a los remanentes, que se ejecutarían más tarde, con los remanentes.
En cambio, el portavoz del PP Carlos Castillo, ha alabado al diputado tránsfuga y sus enmiendas, por valor de 200.000 euros, por que "enriquecen las cuentas". Sepulcre no sólo ha respaldado las cuentas del PP, sino que además, con sus votos, ha vetado las enmiendas de los grupos de la oposición. Todo ha seguido el guió previsto.
El presupuesto de la Diputación, sin contar organismos autónomos, será de 196,1 millones de euros, mientras que el de los organismos y entidades dependientes será de 4,5 millones para el Patronato de Turismo; Instituto de Cultura Juan Gil-Albert, 1,18 millones de euros; Caja de Crédito, 3 millones de euros; Instituto de la Familia Pedro Herrero, 894.387 euros; Suma, 36,5 millones de euros; Proaguas, 5,7 millones de euros y Alicante Natura, 1,3 millones de euros.
El portavoz del equipo de Gobierno, Carlos Castillo, ha defendido las cuentas para 2018 como las "más sociales de los últimos años" y que "sitúa a la personas en el centro de la acción política" y que "pone en valor el territorio y genera oportunidades". Ha destacado que la asistencia a los municipios seguirá siendo una prioridad para la institución provincial "que invertirá más de 70 millones de euros en municipalismo".
Frente al argumentario popular, la diputada de Esquerra Unida, Raquel Pérez, ha lamentado que mientras los municipios gobernados por el PP reciben de media 11 euros por habitante, el resto de entidades locales percibe algo más de cuatro euros por ciudadano. Por ello, ha criticado: "El concepto de participación está despistado, la caridad no es participación".
Desde Compromís, José Manuel Penalva, ha lamentado que la regeneración pase por comprar "la voluntad de un tránsfuga" y ha denunciado que de esa manera se "deslegitiman estas instituciones", en referencia a la Diputación. Ha negado que las cuentas sean municipalistas y ha explicado que el 74% del presupuesto es para mantener el aparato de la Diputación y solo el 22% llega vía subvenciones a los consistorios de la provincia. Ha planteado que la Diputación se ha convertido en "una agencia de colocación del PP" y ha asegurado que "se incrementa en 6.000 euros" el sueldo de la secretaria particular del presidente César Sánchez; y en 10.000 euros anuales, hasta 56.000 euros, el de la directora de Comunicación y Marketing: "Saquen la cuenta de cuánto de cuánto supone el incremento de retribución. Personal directivo colocado a dedo por el PP". "Un ejemplo de lo que no debe ser una administración pública", ha planteado y lo ha ejemplificado en el incremento del 9% del presupuesto de Presidencia y de la asignación de las subvenciones nominativas a los presidentes y vicepresidentes.
Finalmente, el portavoz del PSPV, José Chulvi, ha criticado que el primer punto del orden del día haya sido el incremento de salario de los cargos de confianza y ha contrapuesto que el PP se negó a mejorar el sueldo de los funcionarios en la Generalitat.
Asimismo, ha denunciado que se "pastelea" con la aprobación de un presupuesto "por el apoyo de un tránsfuga". "Son más de lo mismo, no hay plan ni proyecto", ha aseverado y ha dicho que "es política de ir tirando y vamos perdiendo tiempo y oportunidades y credibilidad de la institución. Nadie está para perder ni un minuto".
"Los presupuestos muestran el desprecio del PP a los municipios al no incluir el Fondo de Cooperación Municipal", ha continuado y ha defendido una Diputación que genere "riqueza para todos; que haga fluir el dinero a los pueblos siguiendo solo criterios de necesidad, equidad y oportunidad. En definitiva, una diputación más útil. Sin embargo, estos presupuestos exigen venir a Alicante con el carné del partido bien a la vista para decidir quien se lleva dinero y quién no".
Para el PSPV, el PP "no es la fuerza de liderazgo que necesitan los pueblos de la provincia, sino una oficina de oposición a la Generalitat. Ya es triste que el mayor obstáculo que tiene esta casa para ejercer el mandato de la ciudadanía esté aquí dentro".