Tevenet como paraguas

ALICANTE. Teniendo en cuenta los bandazos que da últimamente el socio de Enrique Ortiz en el Hércules, Juan Carlos Ramírez, vaya usted a saber si una derrota esta noche le cuesta el puesto a Luis García Tevenet.

Esto no es lo que era hace solo dos años, cuando existía la seguridad de que nadie se iba a atrever a hacer correcciones a posteriori a la hoja de ruta que Ortiz y Ramírez diseñaban en su interés. Ahora ya no tienen la seguridad de recuperar el dinero invertido (prestado), lo que unido a la secular escasez de recursos económicos que caracteriza al club condiciona mucho las decisiones a tomar, urgentes o no e incluso aunque se trate de la contratación de un técnico para cuatro meses. 

De todas formas y pese a la categoría y los condicionantes mencionados, esto no deja de ser fútbol y lo normal es que si el equipo lamentablemente cae en el Camp d'Esports, el entrenador sevillano sea cesado. Tevenet dejaría de ser ese paraguas que ha evitado en el último mes que el palco se moje y es que la grada solo miraba hacia el banquillo (y a Lolo), cuando la lista de responsables de la penosa situación deportiva del equipo es larga y de categoría, como diría aquel. 

Eso sí, de ponerse fin por adelantado a la etapa del bueno de Tevenet en el Hércules habría un sustituto por lo que, al menos a corto plazo, el nuevo técnico también ejercería la (involuntaria) función de parapeto del palco de seguir yendo mal la cosa en el césped.