CASTELLÓ. Solo el 20,9 por ciento de los trabajadores de la Comunitat Valenciana puede teletrabajar, una cifra por debajo de la media española, que se sitúa en el 22,3%, según un estudio realizado por la empresa de recursos humanos Randstad para analizar la evolución laboral de los ciudadanos con motivo del Estado de Alerta decretado por el coronavirus COVID-19.
A nivel nacional, 4.405.320 personas disponen de la opción de teletrabajo, lo que se traduce en el 22,3 por ciento del total de población ocupada, que en 2019 ascendió a 19.779.300 personas. No obstante, este porcentaje varía notablemente según las distintas ocupaciones.
Así, del total de profesionales que disponen de la opción de teletrabajo en nuestro país, el 49,8 por ciento corresponde a técnicos y profesionales científicos e intelectuales, un total de 2.194.300, seguidos con notable diferencia de contables, administrativos y otros empleados de oficina, que suman el 20 por ciento del total de profesionales que pueden optar a esta modalidad de trabajo, en concreto 890.930.
En el caso de perfiles de dirección y gerencia, 781.300, estos suponen el 17,7 por ciento del total de profesionales que trabajan y en el caso de perfiles técnicos y profesionales de apoyo, 472.980, el 10,7 por ciento.
Atendiendo al perfil profesional, el cien por cien de mandos directivos y gerentes dispone de opciones de teletrabajo, mientras que en el caso de técnicos y profesionales científicos e intelectuales la cifra es del 59,8 por ciento.
En el caso de contables administrativos y otros empleados de oficina el porcentaje sería del 43,6 por ciento, mientras que los técnicos y profesionales de apoyo sumarían el 22,3 por ciento.
Por comunidades autónomas, las que cuentan con mayor número de trabajadores con opción a teletrabajo y están por encima de la media nacional son la de Madrid, con el 28 por ciento del total de trabajadores de toda España con opción a teletrabajar, seguida de Cataluña con el 25,1 por ciento; Euskadi, con el 24,5 por ciento; Navarra, con el 23 por ciento, y Asturias, con el 22,4 por ciento.
Por debajo de la media de España, del 22,3 por ciento, figuran Cantabria, con el 21,5 por ciento; Aragón, con el 21,2 por ciento; Comunitat Valenciana, con el 20,9 por ciento; Galicia, con el 20,5 por ciento, o Baleares, con el 20 por ciento.
Ya con porcentajes menores al 20 por ciento se encuentran Castilla y León, con el 19,9 por ciento; La Rioja, con el 19,7 por ciento; Región de Murcia, con el 19,3 por ciento; Canarias, con el 19,2 por ciento; Andalucía, con el 19 por ciento; Castilla-La Mancha, con el 18,2 por ciento, y Extremadura, con el 17,5 por ciento.
Un análisis de Randstad llevado a cabo en 2019 revelaba que el 68,6 por ciento de los empleados españoles quería teletrabajar, pero no podía porque su empresa no lo permite. De hecho, el 57,5 por ciento de los ocupados consideraba que en su empleo dispone de todo lo necesario para poder teletrabajar.
Por grupos de edad, los que más solicitan este tipo de medidas son los empleados de entre 25 y 45 años, en concreto el 78 por ciento de ellos. A continuación, se sitúan los trabajadores menores de 25 años, el 64 por ciento, y, por último, los mayores de 45 años, el 58 por ciento.