VALÈNCIA. El conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler, ha elevado el coste de la insuficiente financiación estatal a la Comunitat Valenciana en unos 20.000 millones de euros desde el año 2002, cuando se puso en marcha el denominado modelo Zaplana de financiación autonómica, que se modificó en 2009 con una mejora para los intereses valencianos que resultó insuficiente.
"La infrafinanciación valenciana desde 2002 se eleva en torno a los 20.000 millones, incluyendo los costes financieros, según los primeros cálculos, y esto es intolerable", ha afirmado el conseller durante su participación en la Trobada con la ciudadanía celebrada este jueves en Gandia, que se enmarca en los Diàlegs d’Estiu que ha organizado la Conselleria de Transparencia, Responsabilidad Social, Participación y Cooperación, y en los que están participando todos los miembros del Consell.
La cifra dada por Soler es conocida como 'deuda histórica' y la Generalitat aspira a que sea compensada de alguna manera por el Estado cuando se acuerde un nuevo modelo de financiación autonómica. Equivale a un 45% de la deuda pública total de la Comunitat Valenciana.
El conseller ha mostrado un gráfico en el que se aprecia el déficit de financiación año a año -la diferencia de financiación respecto a la media per cápita del total de comunidades autónomas, más los gastos financieros por la deuda para tapar el agujero-.
Según un comunicado hecho público por la Conselleria, Soler ha afirmado estar "esperanzado en que el informe de los expertos sentará las bases para una discusión política seria que acabe de una vez por todas con la injusta infrafinanciación que sufrimos los valencianos".
Con el informe que el Comité de Expertos presentará antes del 10 de agosto "debe iniciarse un nuevo ciclo político en el que realmente el autogobierno de los valencianos será una realidad y en el que habrá autonomía financiera, porque sin autonomía financiera no hay autonomía política", ha manifestado el conseller.
En el acto, en el que ha contestado a las preguntas de los ciudadanos, ha añadido que "la Comunitat Valenciana viene sufriendo las consecuencias de un sistema de financiación injusto que ha provocado que los valencianos y valencianas no disfruten de los servicios que merecen en igualdad de condiciones que el resto de los españoles".
"Los valencianos no queremos ser más que nadie, pero tampoco merecemos estar a la cola y no contar con el dinero necesario para financiar nuestros hospitales, nuestros colegios y las necesidades en materia de dependencia, pero también para poder dar el máximo respaldo posible al resto de políticas, relacionadas con la dinamización de la economía valenciana o con las infraestructuras", ha proclamado.
Militantes de Madrid, Aragón, Castilla La Mancha, Castilla y León, Galicia y Extremadura reclaman un sistema justo y multilateral
