VALÈNCIA. Semestre histórico el que vivieron en su conjunto las 30 cajas rurales domiciliadas en la Comunitat Valenciana, dado que lograron superar los 20 millones de euros de beneficio, según los datos individuales recabados por este diario de la base de la Unión Nacional de Cooperativas de Crédito (UNACC). Concretamente ganaron 20,55 millones de euros entre enero y junio de este año, lo que representa un incremento del 4% respecto a los 19,76 millones de euros del mismo periodo de 2018 sin tener en cuenta a Caixa Albalat dels Sorells. Conviene recordar, tal y como avanzó este diario a finales del pasado mes de abril, que sus socios aprobaron fusionarse con Cajamar.
Unas menores provisiones y unas mayores captaciones de clientes descontentos con sus anteriores entidades -o que se han quedado sin ellas en sus lugares de origen- tienen mucho que ver en el semestre récord vivido por las cooperativas de crédito de la Comunitat Valenciana. No hay que olvidar que las cajas rurales de la UNACC despidieron 2018 con más socios, empleados y oficinas como contó Valencia Plaza a primeros del pasado mes de mayo.
Un sector -como es el bancario- que sigue afectado por la política de 'tipos cero' del Banco Central Europeo (BCE) y al que ayer se añadió un nuevo frente abierto con el informe -no vinculante eso sí- del Abogado General del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) en Luxemburgo, que advirtió que el Índice de Referencia de Préstamos Hipotecarios (IRPH) puede ser abusivo. Habrá que esperar al primer trimestre de 2020 cuando dicho Tribunal dicte una sentencia firme al respecto porque hay cooperativas expuesta a ello.
Solo media docena de cajas rurales situadas en algún punto de València, Alicante y Castellón redujeron sus beneficios en la primera parte del año. A saber: Caixa Sant Vicent de La Vall d'Uixó (-49,64%), Caixa Rural Vila-real (-28,37%), Caixa Rural Vilavella (-1,12%), Caixa Rural Vilafamés (-0,76%), Caja Rural Cheste (-0,16%) y Caixa Popular (-0,11%), siempre según los datos individuales de la UNACC. Ésta última, la única de las seis que no está integrada en el Grupo Cooperativo Cajamar, que presentó un beneficio conjunto de 2,84 millones de euros, tras reducirlo un 1,78% en los primeros seis meses del año
Dentro de las 17 entidades integradas en el mayor grupo cooperativista español como es el de Cajamar, el mayor incremento porcentual del beneficio vino de la mano de la rural de Villar del Arzobispo (+13,49%), seguido de la de Nules (+12,80%), Callosa d'en Sarrià (+7,66%), Turís (+6,58%) y Alginet (+3,48%).
En cuanto a las 13 al margen del Grupo Cooperativa Cajamar, el beneficio conjunto fue de 17,70 millones de euros. O lo que es lo mismo: un 5% más respecto a los 16,86 millones cosechados entre enero y junio de 2018. La que mejor se comportó en términos porcentuales fue Caixa Rural La Vall San Isidro (+36,57%). Una entidad que, tal y como contó este diario, la primavera pasada se integró en el Grupo Cooperativo Solventia del que forman parte también las rurales de Almendralejo (Badajoz), Utrera (Sevilla), Baena (Córdoba), Nueva Carteya (Córdoba), Cañete de las Torres (Córdoba) y Adamuz (Córdoba).
Tras la cooperativa castellonense se situaron las de Onda (+28,59%), Algemesí (+21,70%), Betxí (+17,95%) y Benicarló (+10,82%), que completaron el 'Top 5' de mayor incremento porcentual del beneficio; mientras que Caja Rural Central de Orihuela, que a primeros de junio celebró su primer centenario, volvió a ser una vez más la que más dinero ganó en términos absolutos con casi un cuarto de millón, al presentar un beneficio de casi 6,10 millones de euros.