firma dedicada al vending, máquinas expendedoras de café y refrescos
Selecta se enfrenta a 300 despidos tras haber sufrido tres EREs en poco más de ocho años
9/02/2018 -
VALÈNCIA. La plantilla de AB Selecta se ha puesto en pie de guerra tras la fusión de Pelican Rouge, Demas y Selecta (firmas dedicadas al vending, máquinas expendedoras de café, refrescos, snacks, etc.) que podría desembocar en el cuarto recorte de personal en poco más de ocho años. La empresa cifra en unos 300 los trabajadores que pueden perder su puesto trabajo.
El pasado mes de enero, se constituyó la comisión negociadora del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) con una modificación sustancial de las condiciones de trabajo que pretende llevar a cabo AB Selecta al fusionar las empresas antes mencionadas. Para el comité negociador, cada tijeretazo ha cumplido el mismo objetivo: "Acabar con el convenio propio de Pelican Rouge", según fuentes sindicales.
A finales de enero, se celebró la primera reunión de la mesa negociadora, en la que la Representación Legal de Trabajadores manifestó a la empresa que, tras haber analizado la información facilitada, entendían "que no existe causa económica que justifique las extinciones de contratos, a tenor de los 46 millones de euros de beneficios" que obtuvo la firma en 2016. "No aceptamos la modificación sustancial de las condiciones de trabajo que pretende la empresa después de tres expedientes de regulación que nos condujeron a la precariedad, sobrecargas laborales y despidos", indicaron las mismas fuentes.
Por su parte, la dirección de la empresa ya ha argumentado que los nuevos procedimientos de trabajo que se pondrán en marcha llevarán consigo una reducción de puestos de trabajo. En números: 300 trabajadores de toda España y 36 en la Comunitat Valenciana. Pelican Rouge cuenta con sedes en Paterna, Ford Almussafes, Alicante y Xàtiva, aunque su servicio de vending a hospitales y grandes empresas cubre todo el territorio de la Comunitat Valenciana.
Los representantes de los trabajadores consideran que una medida drástica como el despido no está justificada y que se podría sustituir por recolocaciones. "No vemos causas económicas, técnicas ni organizativas que los respalden. Estamos frente a un nuevo intento por parte de la patronal de menguar los derechos adquiridos de los trabajadores, disminuir los salarios para así contratar más barato con condiciones precarias y abaratar los despidos de trabajadores con antigüedad y salarios más decentes", zanjan.
A principios de febrero volvieron a retomarse las negociaciones y cada parte defendió sus postulados. No hubo cambios por parte de la dirección de la empresa (que insistía con los recortes) ni por la de los trabajadores (que exigían las todas las extinciones, salvo las voluntarias).
Durante el último encuentro, sin embargo, los representantes de la empresa anunciaron que, tras una nueva evaluación de las circunstancias, las bajas podrían reducirse a 145 (cinco menos que la última propuesta) con indemnizaciones distintas para las extinciones forzosas y las voluntarias, aunque ninguna de ellas superaría los 30 días por año trabajado, con un tope de 16 mensualidades.
Los trabajadores, insatisfechos con la rectificación a la baja, anuncian paros a partir de la segunda quincena de febrero si la empresa no desiste de sus planes. Ambas partes se han vuelto a citar para el próximo día 13 y solo habrá una salida: acuerdo o huelga indefinida.
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