SAN VICENTE DEL RASPEIG. Reducir la interacción social es una de las prioridades para frenar la expansión de la covid-19. Sin embargo, hay lugares en los que no se puede evitar la congregación de gente -siempre que cumplan con las medidas de seguridad establecidas-, como son los centros comerciales, las oficinas de trabajo o los centros educativos. Es, precisamente, en estos últimos espacios en los que los grupos de Ciudadanos y PP en San Vicente del Raspeig han propuesto incluir medidores de CO2 y purificadores de aire para garantizar la ventilación de las aulas sin necesidad de mantener abiertas las ventanas, dadas las bajas temperaturas del invierno.
En cuanto a los medidores de CO2 "cuentan con una alarma que avisa mediante una señal lumínica o acústica cuando un aula no está ventilada de forma adecuada y supone un riesgo de contagio por covid-19. Este aviso permite activar el purificador de aire o bien ventilar el aula mediante la apertura de las ventanas", explican el procedimiento desde Ciudadanos. Y apuntan, a través del concejal Ricardo Bernabeu, que "el Ayuntamiento puede asumir la inversión que supone esta instalación, especialmente útil durante los meses de invierno".
Al respecto de los purificadores de aire con filtros HEPA, Ciudadanos recuerda que la Conselleria de Educación se comprometió a entregarlos a los centros educativos de San Vicente hace meses: "Varios nos han confirmado que no han recibido todavía estos purificadores de aire y, en otros casos, han llegado menos de los que les prometieron o de los que necesitan".
Ante esta situación, la formación insta al Consistorio sanvicentero a hacerse cargo y adquirir los purificadores de aire que necesitan los colegios "y que no van a ser proporcionados por la Conselleria", además de instalar aquellos que "se comprometió a entregar" la Generalitat a los institutos de Secundaria y Formación Profesional de San Vicente. Una exigencia que también hace suya el PP, al manifestar que sería una inversión del Ayuntamiento que también "se podría utilizar en años posteriores, para reducir la incidencia de una gripe normal", ejemplifica la edil Lourdes Galiana.
Una iniciativa que ya han adoptado otros Ayuntamientos "como el de Finestrat o el de Elda, quienes han apostado por invertir en salud y seguridad de la comunidad educativa instalando purificadores de aire en los colegios ya en el mes de noviembre", indica la concejala popular, quien también ha subrayado la "incomodidad" del alumnado y profesorado al tener que permanecer toda la jornada lectiva en clase con "abrigo, guantes o mantas por tener que mantener las ventanas abiertas para que haya una correcta ventilación".
Ante la petición de ambos grupos municipales, la concejala de Educación y Sanidad, Belén Arques (PSOE), se ha escudado en la Generalitat, ya que las competencias en el tema recaen sobre el gobierno valenciano: "Hemos podido constatar que la Conselleria no ha consultado a ningún centro, aunque debería haberlo hecho para conocer las necesidades reales y, así, priorizar los envíos a aquellos donde se imparte clase en espacios sin posibilidad de ventilar de manera adecuada", lanza balones fuera.
En este sentido, la edil explica que, "en su lugar, se ha elaborado una media y se va a enviar en función del número de unidades en catálogo". De esta manera, los centros de una línea van a recibir tres purificadores; los de dos, cinco; los de tres, siete, mientras que a los IES van a enviar cuatro y al Colegio Santa Faz, seis. "Este material llegará a San Vicente en los próximos días, tal y como ha anunciado la Conselleria", traslada.
La administración autonómica envió a los centros educativos en noviembre una guía para la correcta ventilación de los espacios, "con instrucciones específicas para la llegada del frío", puntualiza Arques. En ella se detalla que "cuando, a causa de la temperatura exterior, el ruido o las inclemencias del tiempo no sea posible mantener las ventanas de las aulas abiertas, estas se abrirán completamente cada 25-30 minutos (al inicio y a la mitad de la clase) y durante un periodo de 3-5 minutos". Asimismo, establece que "solo en el caso de que no se pueda recurrir a ninguna medida de ventilación o esta sea insuficiente, se debe purificar el aire con equipos provistos de filtros HEPA".
La concejala de Educación y Sanidad declara que estos aparatos para airear las clases no son métodos alternativos a la apertura de ventanas ni "la panacea para evitar el contagio, como presentan algunos partidos de la oposición con sus argumentos, que generan incertidumbre y pueden crear una falsa sensación de seguridad que conlleve una grave relajación en las medidas que sí se han mostrado efectivas". E insiste en que "el uso de estos aparatos no exime de la necesaria ventilación natural ni evita la transmisión de persona a persona como sí lo hacen la apertura de ventanas y la mascarilla, la distancia y la higiene".