VALÈNCIA (EFE). El alcalde de Valencia, Joan Ribó, ha afirmado que la conclusión del informe realizado por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil es que el PP de la ciudad de València cometió un presunto "delito continuado elecciones tras elecciones y organizado sistemáticamente".
Ribó ha realizado estas declaraciones después de que un informe de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil haya situado al que durante varias legislaturas fue número dos de Rita Barberá y vicealcalde de València, Alfonso Grau, en el centro de la supuesta financiación ilegal del PP local para las campañas de 207, 2011 y 2015.
Según Ribó, que es también portavoz de Compromís en la ciudad de València, "esta semana hemos visto cómo los imputados del PP han intentado impedir la investigación de jueces, fiscales y fuerzas de seguridad con el objetivo de que se archivara el caso".
Ha agregado que "la realidad es tozuda, y al parecer los resultados de la investigación (de la UCO) son muy claros: el PP supuestamente acudió dopado a las elecciones municipales, convocatoria tras convocatoria desde 2007; e hicieron trampas porque para ellos la democracia se les resiste".
"Además, supuestamente, trajinaron con el dinero público de los valencianos. La trama habría negociado presuntamente con empresas contratadas por la administración local para financiar el partido ilegalmente. Es impresentable en cualquier democracia", ha asegurado.
Joan Ribó ha exigido una explicación a la presidenta del PP de la Comunitat Valenciana, Isabel Bonig, que mantiene a los supuestos autores de estos delitos en el Grupo Municipal del PP en el Ayuntamiento de València".
"Exigimos que Mariano Rajoy, que estuvo el pasado fin de semana con algunos de los imputados, dé la cara, asuma la responsabilidad que le corresponde y expulse a los imputados", ha subrayado el alcalde.
Ha asegurado que los valencianos quieren "pasar la página de la corrupción del PP. Bonig y Rajoy deben limpiar su partido de corrupción. Y si no son capaces por oscuros motivos, deberían explicarlo".
Ribó ha comentado que Compromís se personó en la causa para "defender el interés de los valencianos frente a los corruptos. Y continuaremos haciéndolo hasta que se devuelva hasta el último céntimo robado".
La Audiencia Provincial expone las trampas del partido para financiar las campañas de 2007 y 2011. En esta última no se ha podido demostrar el origen de los fondos
Los magistrados ven acreditada la "mecánica fraudulenta" para la financiación de la campaña: de un lado, el desvío de fondos de la Fundación Turismo Valencia y del Centro de Estrategias y Desarrollo; de otro, un total de 1,6 millones de aportaciones "clandestinas" de empresas, algunas de ellas contratistas del Ayuntamiento