VALÈNCIA. (EP). El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado hoy ante la Junta Directiva Nacional del PP que va a pedir al PSOE que negocie el nuevo modelo de financiación autonómica porque el PP "ni quiere, ni puede" aprobarlo en solitario.
"Con 137 votos no se aprueba un modelo de financiación autonómica, por lo tanto, en lugar de convocar manifestaciones, siéntense a negociar", ha exclamado Mariano Rajoy en el inicio del nuevo curso político ante la dirección de su partido, a la que le ha señalado los asuntos en los que se debe centrar el trabajo.
El presidente ha asegurado que se van fraguando acuerdos en el Congreso que permiten sacar adelante asuntos importantes, pero que otros siguen a la espera del consenso. Ha subrayado la financiación autonómica, que requiere del apoyo "como mínimo" de los dos grandes partidos que, además, son los que gobiernan en la mayoría de las CCAA de España.
En su opinión, se trata de una "caso de responsabilidad compartida muy clara", por lo que su partido "ni puede ni quiere aprobar" esta reforma en solitario sino que "quiere y va a pedir" que se apruebe con los votos del PSOE. Tras dar estos argumentos, Rajoy ha mostrado su esperanza en que "todo el mundo esté a la altura de las circunstancias".
Porque a su juicio, ha avisado, puede haber quien caiga en la "tentación" de usar este asunto en la batalla partidista y decida "convocar manifestaciones o convocar a quien estime oportuno", ha dicho, insistiendo en la necesidad de negociar en lugar de organizar movilizaciones.
"Pediría que no se jugase políticamente con este asunto, el PP y el Gobierno no van a aprobar el modelo de financiación sin el PSOE", ha reiterado el presidente, que ha asegurado que "no es bueno" que no tenga el consenso de los dos grandes partidos como lo demuestra el resultado del sistema de financiación de 2009, que salió adelante con el los votos en contra del PP.
La reforma del sistema de financiación ha sido estudiada por un grupo de expertos organizado por orden de la Conferencia de Presidentes. Los trabajos continuarán en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera pero requiere convertirse después en una ley que reforme en el Congreso el modelo.