VALENCIA. El próximo sábado está prevista una reunión del Consejo Ciudadano Valenciano (CCV) de Podemos, la primera cita del órgano tras la celebración del llamado Vistalegre II, que terminó con la victoria de Pablo Iglesias sobre Íñigo Errejón.
En el horizonte se vislumbra ya el proceso autonómico que debe afrontarse en la Comunitat Valenciana: un cónclave del que debe salir la hoja de ruta de la formación morada para los próximos años así como las personas encargadas de dirigir el barco podemita.
Al igual que en otras cuestiones, las opiniones entre la corriente oficialista liderada por Antonio Montiel y el grupo de críticos con su gestión no coinciden respecto a las fechas para celebrar la cita.
Así, mientras fuentes del entorno del secretario general apuntan a mayo o más bien a junio, desde el sector autodenominado renovador pretenden que la asamblea, más conocida como Vistalegre valenciano, tenga lugar "cuanto antes", apuntando el mes de abril como el idóneo.
En este sentido, fuentes de este sector consultadas por este diario apuntaron a que en la reunión del CCV del próximo sábado llevarán diversas propuestas relacionadas con el cónclave entre las que se encontrarán algunas relacionadas con el calendario.
Sobre esto, fuentes próximas a Montiel consideraron procedente que exista un tiempo de "tranquilidad" para "asentar" lo ocurrido en el Vistalegre II y ver "de qué manera afecta a la estructura organizativa del ámbito valenciano". "No conviene un proceso acelerado: hay que aprender de lo ocurrido este fin de semana y es importante recordar que debemos hablar más de estructuras y políticas y no tanto de personas", señaló uno de los miembros del CCV que respaldó a Errrejón, quien recordó además la conformación de una comisión técnica precisamente para hablar de los plazos.