ALICANTE. Segunda reunión sin acuerdo sobre cómo debe procederse para formalizar el ajuste del callejero de Alicante a la Ley de Memoria Histórica con la retirada de las denominaciones de vías públicas que recojan referencias franquistas. Tras cerca de horas de debate, la negociación se retomará el próximo 14 de diciembre en una tercera y, en principio, última sesión de la comisión mixta (políticos, representantes de las Juntas de Distrito, de la UA y de colectivos como Alicante Vivo o la Comisión por la Recuperación de la Memoria) creada en abril del año pasado para impulsar ese proceso.
Como avanzó Alicante Plaza, la propuesta que se elevaba a consideración planteada por la Concejalía de Memoria Histórica consistía en la aprobación de una lista con 39 primeras denominaciones: es decir, todas las recogidas en el acuerdo inicial, aprobado el pasado noviembre en Junta de Gobierno (ahora anulado por sentencia judicial a instancias de un contencioso presentado por el PP), salvo las seis más discutidas por los populares y por Ciudadanos (Cs). Se trata de la Plaza Calvo Sotelo, General Primo de Rivera, Manuel Senante, Martínez de Velasco, Ruiz de Alda, y Avenida Vázquez de Mella. Además, también se habría excluido ahora la calle Jaime Niñoles, al parecer, a petición de sus familiares.
Ese planteamiento contaba, en principio, con el respaldo de los exsocios de Gobierno del PSOE, Guanyar y Compromís, que incluso han abogado por aprobar el dictamen, de modo que se pueda elevar la propuesta de acuerdo al pleno ordinario de diciembre. Sin embargo, el plantamiento no ha sido respaldado por PP y Cs que, según el edil de Memoria Histórica, Fernando Marcos, "han manifestado la necesidad de estudiar calle a calle toda la documentación". Según las fuentes consultadas, los dos grupos han considerado que no habían podido consultar los expedientes en los que se justificaban los cambios. Y, además, han vuelto a mostrar su rechazo a que se pretenda acordar en un mismo trámite la retirada de los nombres y su redenominación, sin someter las nuevas nomenclaturas a la consideración de las Juntas de Distrito, como establece la ordenanza reguladora.
Sea como fuere, Marcos ha destacado, a través de un comunicado, que "la voluntad de este equipo de Gobierno es llevar un acuerdo por unanimidad al pleno y olvidarnos de los tiempos, en aras de conseguir acabar con el esperpento que supone tener estas calles en nuestra ciudad de la etapa más oscura de la historia de España". En esta línea, ha mostrado su confianza en que "el próximo 14 de diciembre seremos capaces de aprobar la propuesta para llevarla cuanto antes al pleno". "Quien no sea capaz de tener suficiente altura política para llegar a un consenso y hacer cumplir la Ley de Memoria Histórica será quien tenga que explicar a los alicantinos los motivos que les mueven", ha añadido.
Durante la sesión, según representantes de Compromís, los responsables de los servicios jurídicos municipales han aclarado que la decisión de acordar el cambio de nombres en la Junta de Gobierno y no en el pleno, en noviembre de 2016, respondió a criterios técnicos. Además, también habrían confirmado que la sentencia del juzgado de lo Contencioso número 4 que anula ese acuerdo no discute ninguno de los nombres propuestos, lo que, según Compromís, acreditaría que la retirada de las 7 denominaciones sería una muestra de la voluntad de consenso de las tres fuerzas aliadas en gobierno hasta hace quince días. "Otros parece que el único consenso que buscan es que no se cambien las calles, lo que es deplorable desde el punto de vista democrático", han sostenido.