VALÈNCIA (EP). La vicepresidenta y consellera de Igualdad de la Generalitat Valenciana, Mónica Oltra, ha considerado, sobre la detención y entrada en prisión del rapero Pablo Hasél, que "no es un buen síntoma para una democracia que se encarcele a alguien por las letras de una canción".
Además, sobre los incidentes y cargas policiales registrados ayer en València tras una concentración a favor del artista, ha reflexionado sobre la conveniencia de evaluar los protocolos policiales para evitar este tipo de situaciones y garantizar el derecho fundamental de reunión.
"Probablemente sí haga falta un cambio en el ordenamiento jurídico penal que preserve la libertad de expresión", ha defendido a los periodistas tras una reunión telemática sobre la atención a personas migrantes.
En València, la concentración pacífica acabó con algunas cargas policiales e incidentes como el vuelco y quema de contenedores en las inmediaciones de la plaza del Ayuntamiento, cuando algunos de los participantes trataron de desplazarse hacia otro lugar.
Para Oltra, esto demuestra que hay que "estudiar si los protocolos realmente están sirviendo para velar por el bien jurídico superior del derecho de reunión pacífica", un derecho que ha recordado que está "especialmente protegido en el núcleo duro de la Constitución".
El derecho a concentrarse, ha recalcado, es de aplicación directa y se debe ejercer "sin perturbación en la esencia del derecho". "Hasta el punto de que las manifestaciones no se tienen que autorizar, no necesitan autorización previa", ha aseverado.
Por tanto, a juicio de la también abogada, "es cierto que en un estado de derecho se tiene que evaluar a qué sirve el protocolo" para garantizar que la comunicación administrativa de una concentración no esté "por encima de la esencia del derecho".
Sobre la situación de Pablo Hasél, la líder de Compromís ha insistido en que "no es un buen síntoma para una democracia que se encarcele a la gente por sus creaciones artísticas: canciones, obras o esculturas". "Nos gusten o no", ha subrayado, porque la libertad de expresión no se basa en los gustos, sino en un derecho fundamental y "especialmente protegido" en la Carta Magna.
Oltra ha hecho hincapié en que "no es un buen síntoma que se encarcele a una persona por las letras de una canción". A partir de ahí, ha sostenido que "probablemente sí haga falta un cambio del ordenamiento jurídico penal que preserve ese bien de la libertad de expresión", recordando que "ya desde los años 80 la jurisprudencia constitucional ha sido muy clara".
Ha apuntado así que "cuando ha habido colisiones entre el derecho a la información o expresión y el derecho al honor, el Tribunal Constitucional siempre ha dejado muy claro que prevalece el derecho a la libertad de expresión e información". Siempre y cuando, ha remarcado, no se vulnere "de manera flagrante" el derecho al honor a través de mentiras, injurias u "otro tipo de fenómenos".
Por su parte, algunos consellers de Compromís y Unides Podem también denunciaron las cargas policiales a través de Twitter. El vicepresidente segundo, Rubén Martínez Dalmau (Podem), mostró su preocupación por las imágenes ocurridas en el centro de València y defendió que "las libertades manifestadas pacíficamente por parte de la ciudadanía nunca deben de encontrarse con violencia, sino con protección y garantías".
Como responsable de Calidad Democrática, Rosa Pérez Garijo (Esquerra Unida) lamentó que estos incidentes le producen "preocupación y mucha vergüenza". Y la consellera de Transición Ecológica, Mireia Mollà (Compromís), rechazó "normalizar que las delegaciones de Gobierno ordenen cargas" en estas concentraciones: "Estas actuaciones no pueden ser el recurso sistemático. Pierde siempre la democracia. ¡Ya está bien!".
También la coordinadora autonómica de Podem, Pilar Lima, afirmó estar preocupada e indignada con las cargas policiales en esta concentración pacífica, además de ponerse en contacto con Delegación del Gobierno para pedir información y "explicaciones urgentes".
Por parte de los partidos, la cuenta oficial de Compromís ha compartido este miércoles un mensaje diciendo "bon dia i #PrimaveraValenciana" junto a una fotografía de las protestas estudiantiles de 2012.
A nivel nacional, el senador de la coalición valencianista, Carles Mulet, ha registrado este miércoles la comparecencia urgente del ministro de Política Territorial, Miquel Iceta, para que diga "los cambios que tiene previstos para cesar inminentemente a la delegada del Gobierno, Gloria Calero, ante su incapacidad para gestionar las funciones que le han sido encomendadas y por ejercerlas de forma totalmente inapropiada", algo que ha achacado tanto a estas cargas como a las diciembre tras una manifestación de ultraderecha en el barrio de Benimaclet.
"Los concentrados reclamaban de forma pacífica la libertad de expresión y los miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad cargaron contra los allí presentes", ha denunciado en un comunicado, advirtiendo que "no es esto lo que se espera de un gobierno que se dice de izquierdas y progresista, sino que recuerda a episodios del pasado".
En consecuencia, para Mulet, la responsable de dirigir a estos cuerpos en coordinación con el Ejecutivo "debe ser cesada, pues no parece que tenga suficiente autoridad ni que la ejerza adecuadamente". También ha recordado "las constantes salidas de tono e incontinencia de la delegada en las redes sociales contra formaciones políticas y personas que no son de su partido", el PSOE.
Calero, en su opinión, ha demostrado demasiadas veces no está capacitada para el cargo: "No es la primera vez que hemos pedido su relevo, pero a partir de ahora la reivindicación se va a convertir en un clamor ensordecedor. No hablamos de anécdotas. Esta señora no puede continuar un segundo más, es una bomba de relojería que ha causado continuos conflictos con el Gobierno autonómico, que erosiona la imagen del gobierno y de las instituciones. Mantenerla es insostenible".