VALENCIA. Aena presentará resultados trimestrales y anuales el próximo 22 de febrero. Se esperan unos ingresos trimestrales de alrededor de 820 millones de Euros y una cifra global para el año sobre los 3705 millones de Euros, un 8% más sobre la cifra de negocios del año anterior.
Sin ninguna duda estamos ante una de las estrellas del parqué bursátil español de los últimos años. Como vemos en el gráfico desde la salida a bolsa de AENA la acción se ha revalorizado un 92% mientras que el Ibex 35 en este mismo periodo ha caído cerca de un 10%.
Los motivos de la historia de éxito de esta compañía son conocidos por todos, ingresos cada vez más altos con unos costes contenidos durante el tiempo. Estamos ante el principal gestor aeroportuario de Europa justamente en un país donde sus visitantes extranjeros presentan cifras récord año tras año.
Las preguntas que nos hacemos todos son obvias: ¿Va a mantener las excelentes cifras en los próximos años? ¿se justifican nuevos aumentos en la cotización de la acción? De momento, AENA ha anunciado que bajará las tasas que cobra a las compañías, es decir de momento una de sus fuentes de ingresos, la vamos a ver mermada. Esto se puede compensar con un mayor aumento de viajeros. Pero ahí es donde va a radicar la dificultad de seguir creciendo.
Una subida del número de viajeros dependerá de si se reactiva el tráfico de negocios (realmente está estancado en Europa desde el 2008) de los efectos de la divisa (caída de la libra) o del efecto sustitución del AVE en líneas nacionales, etc. Es decir, podemos estar ante unas cifras de ingresos que estén ya tocando el techo. Una posible recesión en la Eurozona con las incertidumbres políticas que tenemos tampoco ayuda.
AENA tiene otras alternativas para mejorar sus cuentas de resultados como programas de reducción de costes, desprenderse de activos no estratégicos (aeropuertos en pérdidas) pero de momento no se contempla por su carácter semi-público.
Por estos motivos los análisis de los diferentes bancos de inversión difieren bastante, por cada bróker que dice 'comprar' otro dice 'vender'. Francamente ahora mismo no me posicionaría en la acción salvo una corrección de la misma a niveles de 120 euros.
Otro factor que me invitaría a entrar en la acción es una posible salida del Estado en la compañía y que se rigiese única y exclusivamente por criterios de rentabilidad. No se trata de una compañía mal gestionada pero no se toman decisiones por el carácter todavía público.
Guillermo Ramón Gregori es director GRG EAFI & Asesor Financiero CFA