Foto: RAFA MOLINA.ALICANTE. (VP/AGENCIAS). “Escribo columnas, escribo en prensa, he hecho un programa de viajes, pero el pilar fundamental es la literatura. Es el que me gusta, es en el que disfruto, porque disfruto leyendo”. Habitual de los medios de comunicación, con estas palabras hace ahora un año que el periodista Màxim Huerta (Utiel, 1971) confesaba qué parte de su carrera es su ojito derecho. Lo hacía durante una entrevista concedida a Alicante Plaza, en el contexto de la presentación de La parte escondida del iceberg, una novela de fuerte carga biográfica. Si bien, esta faceta a la que ha dedicado cada vez más tiempo queda –por el momento- en un segundo plano. Desde hace apenas unas horas, el valenciano es el nuevo ministro de Cultura y Deporte.
Fue el último de los nombramientos del presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, que con este anuncio completaba el panel de ministros con los que jugará en la presente legislatura. El último y el único que no se avanzó a la empresa en la lenta y mediática construcción de la alineación del nuevo Ejecutivo. Una formulación, la del último de la fila, que bien parece apuntar a que la decisión no estuvo tan clara como la de los ahora ministros Josep Borrell, Carmen Calvo o Nadia Calviño. Mientras que en la mañana del martes 5 de junio se concretó que Cultura se escindiría de Educación con un ministerio propio, el nombre de su titular se hizo esperar hasta el último momento.
Así, el valenciano se pone al frente de un cartera que se configura como un guiño hacia el sector cultural desde el gobierno socialista, un ministerio que –al contrario que en la anterior legislatura- no está vinculado al de Educación. Sin embargo, el área estará compartida con Deporte, que también gestionará Huerta, descartando así la idea de un único ministerio para Cultura. De esta forma, Ángeles González-Sinde continúa siendo la última ministra exclusivamente de Cultura, cargo que ostentó durante el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.
En el caso de Huerta, la opción se sitúa al margen de la tecnocracia. Mucho se ha justificado el nombramiento de los ministros del Gobierno Sánchez con su pasado profesional y, en no pocos casos, su no vinculación política. Huerta cumpliría con este último punto, pero no con la imagen tecnócrata que ha querido proponer el PSOE en su vuelta al Gobierno central. No en la gestión cultural pública ni privada, más allá de proyectos creativos personales, pero alejado de casos como los del astronauta Pedro Duque al frente del Ministerio de Ciencia o el de Nadia Calviño, la hasta ahora directora general de Presupuestos de la Comisión Europea.
Licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad San Pablo-CEU de Valencia, cuenta también con un Master en Diseño gráfico e ilustración editorial por el Instituto Europeo de Diseño de Madrid. Como periodista, el ahora ministro de Cultura y Deporte ha ejercido de presentador de la edición de noche de Informativos Telecinco, para pasar a conducir la edición matinal de la cadena privada en septiembre de 2004. Ha trabajado once años en El programa de AR (Telecinco), donde fue copresentador del espacio matinal.
Según la Academia de las Ciencias y las Artes de la Televisión, de la cual es miembro, entre 1996 y 1999 trabajó en Televisión Valenciana -Canal 9 y Punt 2- como presentador y editor de Noticias. También en el canal autonómico ha ejercido como redactor de sus servicios informativos y como enviado especial a Francia. Asimismo, en los años 1995-1996 fue jefe de Política Diario Valencia 7 Días y redactor del diario Las Provincias. En 1995 es nombrado director de Prensa Comarcal y también ha colaborado en emisoras de radio como Radio 5 de Radio Nacional de España en Utiel y Radio 97.7 en Valencia.
Recientemente Màxim Huerta ha grabado el programa de televisión Destinos de Película (producido por Globomedia para TVE) donde mostraba los rincones más cinematográficos de ciudades como Londres, París o Nueva York. Huerta colabora con Gente despierta de RNE con la sección titulada Los cinco sentidos, con Glamour, Viajar National Geographic, 20 minutos y El Español. En relación con su faceta de escritor, destaca La noche soñada, con la que obtuvo el Premio Primavera de Novela en 2014. También es autor de la obra de teatro Más Sofocos, junto al director Juan Luis Iborra, y la pieza de microteatro Me quedo muerta.
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