MADRID. La semana pasada tuvo dos claros ganadores: el dólar estadounidense y el real brasileño. El primero fue impulsado por la normalización de las tasas en toda la curva de rendimiento de EE UU, mientras que el segundo experimentó un rally de cobertura, ya que los mercados valoraban una victoria de la extrema derecha. Bolsonaro parece haber asegurado más votos de lo esperado, aunque todavía no cuenta con una mayoría absoluta, por lo que habrá una segunda vuelta.
Un enfoque clave para las próximas semanas será la evolución de los tipos de interés en Estados Unidos. El rendimiento del Tesoro a 10 años ha superado algunos niveles psicológicos clave, y el 3,23% es el más alto desde el año posterior a la crisis de 2011. Con esto, es algo sorprendente que el euro se haya mantenido tan bien como lo ha hecho. Si el vínculo entre el dólar estadounidense y los rendimientos de EEUU continúa debilitándose, es posible que revisemos nuestras previsiones del euro en las próximas semanas.
Perspectivas de las principales monedas
Euro
El euro se mantuvo sorprendentemente bien ante un fuerte aumento del 0,15% en los rendimientos de los bonos del Tesoro de EE UU a 10 años. Sin duda, los datos positivos de empleo y ventas minoristas tuvieron un efecto positivo en el sentimiento. El equilibrio relativo del euro frente a los mayores rendimientos de EE UU es aún más impresionante, dado que los problemas en torno al presupuesto italiano están lejos de resolverse. Con poca información destacada esta semana, el mercado seguirá, principalmente, las noticias sobre el conflicto italiano con Bruselas y la evolución de los rendimientos en EE UU.
Libra esterlina
La primera ministra, May, parece haber sobrevivido a la conferencia del partido conservador, eliminando una de las posibles fuentes de inestabilidad para la libra antes de las negociaciones críticas sobre el Brexit. Todavía esperamos que la libra responda positivamente a cualquier indicio de que ambas partes se están acercando, cada vez más, a un acuerdo.
Dólar estadounidense
Los rendimientos en EE UU continúan disparándose al alza, respaldados por los comentarios optimistas de la Reserva Federal y los datos económicos, muy sólidos. El informe de nóminas registró otro récord de desempleo en este ciclo, ya que los salarios registraron otro modesto pero constante aumento del 2,8%. Los datos de inflación de esta semana, que se conocerán el jueves, serán críticos. Una sorpresa al alza en la cifra de inflación subyacente podría sacudir a los inversores del Tesoro y enviar los rendimientos más altos hacia el nivel psicológico de 3,5%.
Enrique Díaz-Álvarez es director de Riesgos de Ebury